El pretorio, el lugar del campamento romano reservado al pretor o comandante de la milicia, centrará la campaña de excavaciones arqueológicas que este año regresarán al yacimiento militar Aquis Querquennis de Porto Quintela (Bande).
Las actuaciones en el recinto ubicado en la zona inundable del embalse de As Conchas centró ayer la reunión de la Fundación Aquae Querquennae-Vía Nova, presidida por el catedrático Antonio Rodríguez Colmenero, y que contó con la participación de diferentes patronos, incluidos el delegado territorial de la Xunta Gabriel Alén y la alcaldesa de Bande, Sandra Quintas. “Se trata de retomar los trabajos, que el año pasado no se pudieron efectuar, rematando lo que quedó pendiente de la puerta e iniciando una actuación en el pretorio”, dijo Antonio Rodríguez Colmenero, quien recordó y agradeció las aportaciones de la Confederación Hidrográfica Miño-Sil y de la Diputación de Ourense que permitirán sufragar los dos meses de excavaciones y que, si el nivel del embalse lo permite, arrancarán la primera semana de agosto.
Firma de un convenio
En el transcurso de la sesión, la alcaldesa de Bande confirmó la inminente firma de un convenio con Turismo por valor de 20.000 euros que permitirá costear la apertura permanente durante el periodo estival del Centro de Interpretación Aquae Querquennae. Actualmente, y para facilitar el acceso al espacio museístico, el Concello ha establecido un servicio de cita previa en el teléfono 988 443 001.
El director de las excavaciones en “Aquis” seguirá siendo el arqueólogo valdeorrés Santiago Ferrer, quien confirmó los trabajos en la zona donde estaba el edificio del mando superior de la unidad. “Es una zona amplia, de unos 1.000 metros cuadrados, que requerirá dos o tres campañas para ejecutarla en su totalidad”, reconocía Ferrer, quien añadió que en este 2021 también se llevará a cabo la consolidación de la puerta principal del sur (porta principalis dextra). “Se excavó y quedó pendiente desde 2019. Ya tenemos allí la piedra. La mitad del equipo se dedicará a la excavación y la otra mitad a la consolidación”, dijo Ferrer.
En un futuro, la intención de Rodríguez Colmenero es ahondar en la zona donde antiguamente estaba la iglesia, así como en la mansión, cuya última intervención data de los años 90 del siglo pasado.
