Las zonas degradadas este año por los incendios en el Parque Natural do Xurés, en concreto en la parroquia de Venceáns, en Entrimo, que sufrió la lacra del fuego el pasado mes de marzo -afectando a 110 hectáreas según la Xunta y más de 300 para los comuneros-, serán objeto de varias intervenciones en materia de recuperación y expansión de la vegetación de galería con tareas de tratamiento de las masas juveniles de 'quercus pyrenaica' (roble) y actuaciones de acondicionamiento y mantenimiento de la red de drenaje.
Eso sí, García-Borregón no concretó la fecha de inicio de los trabajos, ni la dotación presupuestaria para poner en marcha los mismos.
Así lo aseguró ayer el director xeral de Conservación da Natureza, Ricardo García-Borregón, en respuesta a las críticas del socialista Pablo López Vidal en la comisión de agricultura del Parlamento, donde se trató la ausencia de medidas para paliar los efectos del fuego en la Baixa Limia, y que ya generaron en abril una manifestación al pie de la Sierra de Queguas por parte de los comuneros de Entrimo; sobre todo por la comparación del trato de la Xunta con otros espacios naturales como las Fraguas do Eume.
Para el diputado socialista las medidas de recuperación de las zonas calcinadas en el territorio protegido en Lobios, Muíños o Entrimo 'non son as máis axeitadas' y acusó a García-Borregón de querer 'minimizar' los efectos del fuego. 'O Xurés precisa dun informe completo no que se realice unha valoración e se aproben unha serie de actuacións para a súa recuperación, e convertirlo así nun polo económico e de atracción de turismo', matizaba López Vidal que considera que, de no hacerlo, 'están condenando a extinguir este territorio protexido'.
El director xeral negó tales acusaciones y lamentó que el Xurés sea un territorio 'onde, por desgracia, véñense producindo os lumes de manera reiterada: 2.200 incendios forestais e 5.000 hectáreas calcinadas nos últimos dez anos'.
Así lo aseguró ayer el director xeral de Conservación da Natureza, Ricardo García-Borregón, en respuesta a las críticas del socialista Pablo López Vidal en la comisión de agricultura del Parlamento, donde se trató la ausencia de medidas para paliar los efectos del fuego en la Baixa Limia, y que ya generaron en abril una manifestación al pie de la Sierra de Queguas por parte de los comuneros de Entrimo; sobre todo por la comparación del trato de la Xunta con otros espacios naturales como las Fraguas do Eume.
Para el diputado socialista las medidas de recuperación de las zonas calcinadas en el territorio protegido en Lobios, Muíños o Entrimo 'non son as máis axeitadas' y acusó a García-Borregón de querer 'minimizar' los efectos del fuego. 'O Xurés precisa dun informe completo no que se realice unha valoración e se aproben unha serie de actuacións para a súa recuperación, e convertirlo así nun polo económico e de atracción de turismo', matizaba López Vidal que considera que, de no hacerlo, 'están condenando a extinguir este territorio protexido'.
El director xeral negó tales acusaciones y lamentó que el Xurés sea un territorio 'onde, por desgracia, véñense producindo os lumes de manera reiterada: 2.200 incendios forestais e 5.000 hectáreas calcinadas nos últimos dez anos'.
