En Estados Unidos empieza a preocupar que el porcentaje de chicas que obtienen título en los diversos niveles educativos es superior al de los varones, algo que ya hace algunos años está pasando en España, pero según parece en Estados Unidos están insistiendo que para elevar el nivel hay que mejorar la educación del carácter, ya que consideran que el problema reside en las diferencias en el comportamiento, o sea, que la cuestión del retraso académico o el abandono de los estudios de los chicos es un tema que cada día preocupa más, y no sólo aquí, aunque siempre se sabe que el éxito académico está relacionado con la capacidad
En Estados Unidos empieza a preocupar que el porcentaje de chicas que obtienen título en los diversos niveles educativos es superior al de los varones, algo que ya hace algunos años está pasando en España, pero según parece en Estados Unidos están insistiendo que para elevar el nivel hay que mejorar la educación del carácter, ya que consideran que el problema reside en las diferencias en el comportamiento, o sea, que la cuestión del retraso académico o el abandono de los estudios de los chicos es un tema que cada día preocupa más, y no sólo aquí, aunque siempre se sabe que el éxito académico está relacionado con la capacidad de mantener la concentración, la perseverancia en el estudio y el control de los impulsos.
Parece claro que en la medida que las escuelas se ha orientado hacia un estilo pedagógico centrado en los sentimientos y contrario al riesgo que prima la colaboración se ha ido apartando más y más de la sensibilidad de los chicos. Así que, tal vez, tengamos nosotros que mirar hacia los ingleses, canadienses y australianos que están teniendo grandes resultados con programas centrados en mejorar la atención y el compromiso de los chicos, y esto incluye tolerancia cero frente a la indisciplina y más hombres y el profesorado.
Parece claro que en la medida que las escuelas se ha orientado hacia un estilo pedagógico centrado en los sentimientos y contrario al riesgo que prima la colaboración se ha ido apartando más y más de la sensibilidad de los chicos. Así que, tal vez, tengamos nosotros que mirar hacia los ingleses, canadienses y australianos que están teniendo grandes resultados con programas centrados en mejorar la atención y el compromiso de los chicos, y esto incluye tolerancia cero frente a la indisciplina y más hombres y el profesorado.
