La hostelería de Celanova necesita más profesionales cualificados

Un momento de la presentación con Karina Pardo, Julia Rodríguez y Jaime Sousa.
photo_camera Un momento de la presentación con Karina Pardo, Julia Rodríguez y Jaime Sousa.
La Mancomunidad Terra de Celanova promueve un curso de camareros para bares y restaurantes

La demanda de profesionales en el sector de la hostelería, con un verano donde la carencia de personal ha sido significativo en la zona, ha llevado a la Mancomunidad Terra de Celanova a liderar un curso de formación operaciones básicas de hostelería en restaurante-bar. “Dende a Mancomunidade seguimos a fomentar este tipo de actividades. É moi importante este curso porque a demanda na hostalería cada vez é maior e a xente hai que formala”, trasladaba el presidente, Jaime Sousa, quien ayer visitó a los participantes junto con Julia Rodríguez, directora del Centro de Información á Muller (CIM) en el que se enmarca la acción dentro del programa de Promoción da Igualdade e de Prevención da violencia de xénero.

Los salones del Hotel Celanova, en la villa de San Rosendo, albergarán las 100 horas de formación gratuita para los participantes, un total de 15, que al acabar el curso recibirán su correspondiente certificado. “Lo que perseguimos es que cojan las nociones básicas de lo que es un camarero, tanto en restauración como en cafeterías. Y que estas prácticas que vamos a realizar las puedan desempeñar en un futuro puesto de trabajo”, trasladaba la docente, Karina Pardo Iglesias, quien trasladaba la alta demanda del sector, “tanto en temporada alta como baja”, así como la cada vez mayor exigencia de trabajadores cualificados.

Solo tres de los 15 alumnos que asisten al curso cuentan con experiencia laboral en el sector. El resto, con profesiones y formación diversa, ve en la hostelería “una oportunidad de aprender y buscar nuevos empleos”, reconocía Mariana, administrativa. Recién llegada de Venezuela, para Marlén Vázquez el curso es “una oportunidad de integración, de conocimiento, de adaptación y una nueva salida laboral y para poder reinsertarnos en España”, dijo agradeciendo especialmente una formación que deseaba “tenga continuidad en el tiempo”, dada la necesidad de formación constante que requiere el mercado actual.

Necesidad de oficios

La falta de profesionales se ha hecho especialmente visible este verano en Celanova. Tal y constaban desde la asociación de comerciantes, hosteleros y empresarios de la localidad, casi la mitad de los establecimientos de hostelería asociados (10 de 23) trataron de ampliar su plantilla este verano, con éxito dispar. “Hai carencias de persoal sobre todo en hostalería, pero tamén en outros sectores como albanelería, fontanería, electricidade… hai necesidade de oficios”, comentaba la gerente Mari González, quien entiende que son muchos los factores que influyen en la falta de relevo en el sector, uno de los motores económicos del municipio.

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