Los ourensanos, que acabaron perdiendo en Boiro, estrellaron una pelota en el poste en el tramo final del partido
El Barbadás regresó de vacío de su visita a Barraña luego de caer ante el Boiro por dos goles a uno en un partido en que los ourensanos merecieron mejor premio.
El encuentro comenzó con ambos equipos intentando llevando el control, sabedores los Os Carrís que la ansiedad por ganar el primer partido esta temporada del Boiro podría jugar a su favor si aguantaban los primeros minutos de empuje local.
Eso propició que el Barbadás estuviera más replegado, pero sin renunciar a intentar sorprender a un Boiro muy necesitado. Así llegó la primera ocasión para los jugadores de Moisés Pereiro. Luego de una buena triangulación, la pelota terminó en el azulón Helder que se plantó solo ante el portero Kike Reguero y en una gran intervención consiguió arrebatarle la pelota al jugador ourensano.
El Boiro tenía clara su estrategia. El debut del delantero brasileño Igor de Souza, un jugador con mucha envergadura, propiciaba que los locales le buscaran una y otra vez. Y así llegó el primer gol local, cuando el primer tiempo estaba llegando a su final. Fue un centro que el delantero controló y dejó para que Hugo Sanmartín, con un tiro cruzado, superara a Rui, meta del Barbadás (1-0, minuto 45).
La segunda parte tampoco comenzó bien para los ourensanos. En el minuto 53, un balón largo a la espalda de la defensa ourensana fue aprovechado de nuevo por Igor de Souza para hacer el 2-0 con un disparo raso.
A raíz de ese gol, el Barbadás dio un paso al frente y se hizo con el dominio del partido.
Diez minutos más tarde logró acortar distancias por medio de Caique, que con un disparo desde fuera del área hacía el 2-1.
Desde ese momento y hasta el final los ourensanos fueron los dominadores absolutos del encuentro y gozaron de ocasiones para haber conseguido el empate. Dos buenos disparos de Ilyes y Helder los detuvo kike Reguero con apuros, y el más claro fue un zapatazo de Toni que devolvió el poste de la portería local.
