El Rápido de Bouzas se llevó un partido en el que los locales merecieron algo más
El Barco, no pudo dar una alegría a sus aficionados, al caer de nuevo en Calabagueiros, esta vez ante el Rápido de Bouzas, por 1-2.
Los locales, que salieron muy enchufados, se hicieron con el control del partido, desde el pitido inicial, ante un equipo vigués que se encontraba cómodo dejando la iniciativa en el juego a los de Javi Rey. De esta manera, en una de las primeras llegadas con peligro, los barquenses anotaron el primer gol. Fue una jugada que comenzó en las botas de Adil, que tras superar a un par de rivales, cedió a Javi Recamán que se marchó por su banda y sacó un centro preciso, que en el segundo palo remató de cabeza y de forma inapelable, el centrocampista Borja.
Como en partidos anteriores, el Barco había hecho lo más complicado, adelantarse en el marcador, pero igual que sucedió en los últimos partidos en casa ante el Deportivo B o el Racing Villalbés, los locales no fueron capaces de mantener el resultado a su favor.
A los 32 minutos, el Bouzas lograba el empate. Fue el defensa Portas, el que con la derecha aprovechó un balón suelto para superar a Macía. Pero lo peor todavía estaba por llegar.
Golazo de Gabi Misa
En el 65, una falta sin aparente peligro, la ejecutó Gabi Misa desde 35 metros y superó a Macía. Pudo empatar el Barco, pero una falta de Rubén García se fue a la escuadra y un remate de Borja lo evitó Sergio Ríos con un paradón.
