Sangre, sudor y victoria. Así se resume el duelo que disputó el Campus Ourense ante el Universidade de Vigo en tierras olívicas (esta vez como visitante). Los ourensanos se sobrepusieron a las bajas y a los sacrificios que están haciendo al no tener un campo propio y consiguieron un triunfo de mérito en el derbi gallego de la División de Honor B tras el 18-26 final.
Del Campus fue el inicio. Tardó en abrirse el marcador. Apareció Jason Harvey para anotar un golpe de castigo y conseguir un ensayo con su transformación. Colocó el 0-10. Pero los vigueses reaccionaron de inmediato. En una secuencia de "golpes" parecida lograron situarse 11-10 al descanso.
En la reanudación, el Campus volvió a adelantarse. Penitito y Pérez subieron el 11-18 al marcador. Vigo no dijo su última palabra y volvió a poner las tablas.
Pero los de Monreal sacaron fuerzas de flaqueza. Un ensayo de Mikaele y una patada de Pérez dejaron el definitivo 18-26 y certificaron un triunfo de oro.
