Sensible mejoría del equipo de Rafa Sanz, aunque insuficiente para ganar el primer partido de la temporada. Y aquí está la paradoja del equipo, que mantendría a Hamlet en otra duda vital.
¿Puede mejorar este COB? La respuesta puede ser afirmativa, repasando los numerosos errores en defensa y ataque que esta plantilla cometió contra el Rioja. Fallos con posibilidad de corrección. Lagunas que no impidieron competir por el partido hasta el minuto 38.
¿Hay tiempo disponible para ello? 'That is the question'. El COB ha consumido los tres primeros partidos de una lista de 26. La ecuación entre su progresión -supuestamente favorable en los próximos encuentros- y los resultados favorables es la clave más inquietante en este momento.
Rafa Sanz tendrá que tumbar a varios de sus jugadores sobre el diván, encender con tranquilidad una pipa y escrutar sus cerebros. Una parte importante de ellos parece acusar la falta de confianza en la pista. Un grave problema que reduce sensiblemente su rendimiento y les hace peores de lo que realmente son. Cada uno requerirá su tratamiento, meditación o electro-shocks, pero necesitan sentirse importantes en un equipo que sólo parece funcionar cuando todos sus miembros están en la fábrica.
Y mientras sucede este proceso, la LEB sigue y devora a sus víctimas. Próxima parada, Barcelona.
¿Hay tiempo disponible para ello? 'That is the question'. El COB ha consumido los tres primeros partidos de una lista de 26. La ecuación entre su progresión -supuestamente favorable en los próximos encuentros- y los resultados favorables es la clave más inquietante en este momento.
Rafa Sanz tendrá que tumbar a varios de sus jugadores sobre el diván, encender con tranquilidad una pipa y escrutar sus cerebros. Una parte importante de ellos parece acusar la falta de confianza en la pista. Un grave problema que reduce sensiblemente su rendimiento y les hace peores de lo que realmente son. Cada uno requerirá su tratamiento, meditación o electro-shocks, pero necesitan sentirse importantes en un equipo que sólo parece funcionar cuando todos sus miembros están en la fábrica.
Y mientras sucede este proceso, la LEB sigue y devora a sus víctimas. Próxima parada, Barcelona.
