Hace 14 años que no se registraba un 3-2 en una final y la primera en la que un bigoleador no pudo levantar el trofeo
Los jugadores, el cuerpo técnico y la directiva del Arenteiro celebraron hasta altas horas de la madrugada la obtención de su segunda Copa Diputación. A pesar que tuvieron que pasar 13 años de la anterior, mereció la pena después de las decepciones sufridas en el 2005 ante el Barbadás y la última, en 2007 frente al Verín.
Fue el partido de algunas despedidas como la del capitán Carlos Escudero que lo coronó con una gran actuación y conquistando su segundo trofeo tras el obtenido con el desaparecido Atlético Vilamarín donde coincidió con su compañero Gele. "No hay palabras para describir esto tras un partido disputado donde no lo pusieron fácil y al final nos llevamos merecidamente esta copa. Me llevo de aquí la afición, amigos y un título".
El entrenador Miki López se quitó la espina y no pudo contener las lágrimas cuando se fundió en un abrazo con su lateral Carlos.
Los otros jugadores carballiñeses que también cuentan con dos copas son Dani Arbo, que marcó el gol de la victoria ante el Bande, Marcos Sotelo y los ex Ourense B Pana, Choco, Ocampo, por segunda temporada consecutiva y Martín Pérez en la segunda final que se jugó lejos de O Couto.
El portero Marcos Nieto ganó las tres que disputó. Las anteriores con el filial del CD Ourense y el Valenzá donde fue decisivo en la tanda de los penaltis para derrotar al Barco. "Es una alegría inmensa lograr esta copa para una villa como O Carballiño con una de las mejores aficiones de Galicia. Ha sido el fruto del trabajo de todo un año, de esfuerzo logrando al salvación de una forma holgada y esta copa es un premio", dijo el meta.
Si bien un problema en el sóleo le privó el poder disputar su quinta final, Diego López logró su tercera Copa Diputación luego de las dos conseguidas con el Barbadás B.
Desde la final que ganó en la prórroga el Velle al Ourense B que no se lograba un 3-2 en una final.
El desconsuelo de Diéguez
Los anteriores cinco bigoleadores en una final tuvieron como recompensa levantar la copa, no fue el caso del delantero del Bande Sergio Diéguez que llegó a levantar por dos veces un marcador en contra.
El medio Lolo González tampoco tenía consuelo al perder su tercera final y todas en diferentes clubes. El emblema del club, Troita sostuvo que "hicimos todo lo posible para llegar, no tuvimos suerte en un partido disputado, pero al final ellos fueron dignos merecedores de ganar la Copa".
