Después de una semana de sentimientos contrapuestos, primero con las derrotas liguera en Os Remedios ante el Poio y en la Copa de la Reina frente al Móstoles, y después con la victoria en Majadahonda (0-4) en el regreso a la liga, el Ourense Envialia prepara la última cita antes del parón. La idea es la de mantener “las buenas sensaciones” que dejó el duelo ante el conjunto madrileño. “Hicimos una gran primera parte. Después, en la segunda, ya con el marcador muy de cara, tocó defender su juego de cinco, y lo hicimos bien”, destacó Raquel Mondo. Más allá de esta victoria, la entrenadora del Envialia reconoció que “más allá del partido de Copa, que ha sido un palo y una desilusión muy grande, las sensaciones están siendo buenas. En el día a día el grupo está demostrando mucha ilusión, ganas de aprender y no existe frustración. Ellas (las jugadoras) saben que el objetivo se logrará desde el trabajo”.
Y explica lo de la frustración. “Quizá yo lo esté más que las jugadoras”, aunque se refiere más a “desilusión” que a fracaso. “Teníamos muchísimas ganas de jugar la fase final de la Copa y el inicio del partido ante Móstoles no hacía pensar lo contrario. Hicimos muy buena primera parte y nos fuimos al descanso 0-1 abajo. En la segunda parte, pequeños detalles hicieron el resto”, añade la entrenadora del conjunto ourensano.
Ahora le toca pensar en el partido de Os Remedios ante el Sala Zaragoza, el último antes de las vacaciones por la Navidad. Mondo avisa de que se trata de un partido trampa. “Está abajo, pero ha sido capaz de empatar al Alcorcón y de ponerle las cosas muy difíciles al Poio”.
Lo tendrá que afrontar con las bajas habituales y alguna más. “No vale de nada llorar”, asegura Mondo, pero es cierto que los problemas con la enfermería se acumulan. La portera Elisa entra en su cuarto mes de lesión y por el momento no tiene visos de regresar. Ella es solo una de las tres lesionadas de larga duración junto a Ju Pedreira, que se ha operado de la rodilla hace un par de semanas, así como Iria Saeta, que afronta el tramo final de su recuperación de la fractura en la muñeca y “esperemos que en enero podamos contar con ella”. La última en lesionarse fue Uxía, la portera que había tomado la responsabilidad cuando Vane Barberá también tuvo problemas en el talón. Las dudas para el duelo ante el Sala Zaragoza serán Sara Moreno, que arrastra un proceso vírico, así como Jenny Lores, que arrastra molestias físicas. Último esfuerzo y después, Navidad.
