El entrenador del filial del Ourense abandonará al club de O Couto tras la disputa el próximo sábado de la Copa Diputación ante el Verín
El entrenador del Ourense B Francisco Manuel Vázquez Rodríguez ha dicho basta. El próximo sábado, cuando su equipo juegue ante el Verín la final de Copa Diputación, pondrá el punto final a su etapa como entrenador del filial.
Atrás quedan dos temporadas de mucho sufrimiento en lo extradeportivo pero también con muchas alegrías en el aspecto deportivo y a las que todavía espera ponerle el colofón con la victoria en la final copera. Un ascenso a Preferente, la salvación esta temporada, la mencionada final y el ver como muchos jugadores debutaron con el primer equipo de su ciudad.
Manel Vázquez tiene claro que se acabó su etapa en el filial, y razona esa decisión: "El sábado pondremos el broche final a dos temporadas fantásticas deportivamente hablando y pase lo que pase en la final yo no entrenaré la próxima temporada al Ourense B, se ha terminado un ciclo". Para sus jugadores también tiene palabras de elogio: "Son unos jugadores excepcionales que además han demostrado estar muy preparados y con un gran compromiso. Por desgracia, Club Deportivo Ourense volverá a perder a otra buena generación de futbolistas si nadie lo remedia. Es más, muchos de ellos ya están comprometidos con otros equipos porque buscan una estabilidad que aquí no tienen, incluso algunos de ellos vestirán la próxima temporada la camiseta de nuestro rival en la final de Copa (el Verín)".
Valoración personal
Tras conocerse su marcha del filial, el técnico rojillo hace un balance de lo que fueron sus dos temporadas al frente del equipo: "Me voy muy orgulloso del trabajo realizado, se ha vuelto hablar del Ourense B y de sus jugadores ourensanos, pero no ha sido nada fácil. Ccogimos un equipo roto, descendido y con ocho jugadores, y se logró ascender y esta temporada, con todo lo que pasamos, se salvó la categoría y vamos a jugar una final de Copa. Además, seis jugadores ourensanos, algunos procedentes de Primera regional, han debutado con el primer equipo y lo han hecho con buena nota. Esto no sería posible si no confiaran en un proyecto que le ofrecimos, es por eso que les estoy muy agradecido a todos".
Manel Vázquez vivió desde el filial la situación actual del club: "Nada bien, me gustaría decirles a algunos que esto no es un juguete que va de mano en mano, es un club de fútbol que durante 62 años de historia ha despertado grandes sentimientos y ha generado muchas alegrías a esta ciudad por lo que creo que no debe ser ninguneado de la forma que se está haciendo". E incluso va más lejos afirmando que "como ourensano, socio y aficionado al fútbol sólo pido que se le dé el trato que merece, si se considera que es viable pues adelante, que se haga un proyecto de futuro serio y responsable, y sino que lo dejen morir en paz pero que podamos recordarlo como se merece y que no se prolongue más su agonía y la incertidumbre que todos los años hay que pasar".
