El derbi quedó en manos de Melias, un equipo que se mostró ambicioso, peleón y con las ideas más claras desde un primer momento ante un Vilariño que tras perder 1-3 cae de pleno en los puestos de descenso directo.
Desde el mismo arranque del partido el equipo de Carolo sufría el primer contratiempo con la lesión de Benji.
La disputa del balón fue una constante durante la primera media hora, en la que era complicado hilvanar dos jugadas seguidas, pero aun así era el Melias quién buscó por las bandas generar más peligro que su rival, donde aparecían los duelos Marcos Pascual-Poli por el sector derecho del ataque visitante y el de Luis-Obaya por la banda opuesta.
A los anfitriones les faltaba más mordiente, tratar de presionar más arriba y no proporcionarle espacios a los delanteros del conjunto de Marcos Zorrilla. Además, se notó la ausencia de David Nogueiras, que fue bien vigilado y casi no pudo explotar sus cualidades. Entonces las posibilidades de sorprender a Christian eran ínfimas.
Lo que no imaginaba el Melias era recibir un regalo para abrir el marcador. El defensa Joshua se equivocó al querer jugar el balón a su portero, siendo interceptado por Luis que, al entrar al área, sería derribado por Rodri, cometiendo el penalti que transformó Diego Bahía para poner el 0-1.
Esta situación fue complicada de asimilar por un Vilariño que no mostró su mejor imagen y que antes del cierre de la primera parte encajaría el 0-2. Saque de esquina desde la derecha que se paseó por el área y que aprovechó Pablo, libre de marca, para fusilar al portero e irse al descanso con gran parte de la tarea cumplida.
Se esperaba una cambio de actitud y rebeldía por parte de los dueños de casa. Esa sensación de mejoría se transformó en el verdadero pepinazo de Otero mediante una falta lateral que se metió por la escuadra y supuso el 1-2. La otra gran noticia era la vuelta a los campos de su delantero Gonzalo, pero no gozó de una buena compañía que hablara su mismo idioma, con lo cual su aporte en solitario acabó siendo engullido por la segura defensa del Melias.
Los visitantes no quisieron más sorpresas y fueron creando ocasiones. Carlos, que desarrolló una gran tarea en la zona de gestación, no olvidó su habitual labor como delantero. Lanzó una falta que despejó en una gran estirada Rodri, que más tarde volvió a mantener con vida a su equipo ante un remate forzado de Diego Bahía.
A estas alturas estaba mucho más cerca que llegase el tercero de los visitantes que las ganas del Vilariño de alcanzar el empate.
GOLAZO DE AARÓN
El derbi nos tenía reservada otra jugada para enmarcar. Aarón, tras cruzar la mitad del campo, se atrevió con un tremendo bombazo que le sacó la telaraña a la escuadra, superando la estirada de Rodri y sentenciando el partido con el definitivo 1-3.
Los últimos minutos fueron un manotazo de ahogado del cuadro local, donde Esteban pudo marcar el 2-3, pero en una gran respuesta salvó bajo palos Christian y como respuesta Ángel intentó una vaselina que se marchó sobre el larguero.
El Melias se aleja un poco más de la quema, mientras que el Vilariño observa el futuro con más dudas.
