El ourensano trabaja en un programa de la Federación Española para descubrir “diamantes en bruto” en otros deportes
Conoce el rugby como la palma de su mano. Desde el campo, el banquillo y los despachos, David Monreal sabe latín. Y por eso sigue acumulando funciones. Además de ser el técnico del Campus Ourense, tanto del primer equipo como coordinador de toda la base, el ourensano forma parte ya de un novedoso programa de la Federación Española: es el encargado de descubrir a nuevos talentos en Galicia para el rugby español que estén practicando otros deportes a nivel amateur. “Hablamos de deportistas que no llegan a ser profesionales en otras disciplinas, que no pueden participar en grandes eventos, que llega un momento en el que no pasan cierta barrera y a lo mejor se frustran. Y pueden encajar perfectamente en el rugby. Están acostumbrados a entrenar a buen nivel y, cambiando de modalidad, podrían aspirar a jugar un Mundial o unos Juegos, que el rugby 7 es olímpico”, explica Monreal.
Ya hay casos muy representativos. Manu Mora, el capitán de la selección española, llegó al balón oval desde el remo con 27 años. Laura Delgado, “Bimba”, se dedicaba al lanzamiento de peso y ahora es profesional en el rugby inglés. Una puerta abierta a un futuro con oportunidades cuando el deporte “madre” no acaba de funcionar. “Hay hacer un poco de scouting de otros deportes, que no sea de una manera intrusiva. Poner encima de la mesa que, si ves que no llegas a más en una disciplina, hay otras opciones que pueden encajar, que son atractivas y que pueden abrir la puerta a jugar grandes competiciones. Hablar con ellos y ofrecerles desde la Federación un programa de entrenamientos que les permita alcanzar el máximo rendimiento posible para hacer una carrera en el rugby”, detalla Monreal.
¿En qué se fijará el ourensano? Lo primero, la capacidad física. “Lo primero, el tamaño. Gente grande, que en rugby español no abunda precisamente, y a lo mejor están en el balomano o baloncesto sin llegar a niveles altos. Aquí tenemos el caso de Santorum que, si llega a querer cambiar de club, hubiese jugado en División de Honor, por supuesto. Y recuerdo que el entrenador de la sub-20 española se fijó en él y se pensaba que era extranjero”.
Un proyecto de ida y vuelta. Monreal buscará por Galicia ese talento oculto que puede renacer con el balón oval. Pero toda persona que crea que cumpla las características y quiera formar parte del programa, solo tiene que contactar con el técnico ourensano. “Igual llegan con carencias de rugby, sin conocer demasiado, pero, por ejemplo, en el caso de atletismo, la velocidad compensaría esas carencias. Se trata de ver qué posibilidades hay y darle la oportunidad al deportista de mejorar”.
Buscar, encontrar y pulir. Conceptos que tendrá que aplicar el ourensano para que el rugby nacional siga creciendo.
