Savia nueva para el Santa Teresita

Las escaladas, el ser guía de montaña y hasta coordinar de rutas con campamentos son las otras aficiones de Joel Docampo Lorenzo (23-3-1994), que esta temporada pasará a ser el nuevo entrenador del primer equipo del Santa Teresita (que está en Primera Galicia), el club de toda su vida: "Jugando en el los juveniles me llamaron del Pabellón y mientras estaba allí, con 16 años, empecé a entrenar el primer equipo de prebenjamines que se formó en el "Santa" y esta faceta siempre estuvo rondando por mi cabeza. Aún jugando, siempre estaba pendiente de todo". Parece todo un reto reemplazar a Jacobo Porto, ¿no? Correcto. Para mí es un sueño, pero no vengo a sustituirlo, ya que la próxima temporada la iba a comenzar con él, pero por cuestiones personales suyas me ha tocado a mí. ¿Esperaba esta posibilidad? Sí, en algún momento, pero no tan pronto. Iba a formar parte del cuerpo técnico con Jacobo, una persona que quiero mucho, al que considero un amigo, por eso voy a intentar seguir su línea. Durante dos años estuvo entrenando en el País Vasco, ¿cómo fue la experiencia? Me encontraba estudiando la carrera de Economía y de paso aproveché esa posibilidad. El Athletic y la Real son equipos que tiran mucho de la base, pero las diferencias son bastante grandes con el resto. En Vizcaya, donde me encontraba, todo el mundo es muy competitivo y desde las categorías muy pequeñas hay mucho seguimiento. Es un juego muy distinto, mucho más directo y con más disputa de balón. Como todo el mundo ve que hay una posibilidad de poder llegar al fútbol profesional todo es mucho más intenso, otro mundo. ¿Que aspectos incorporaría en el Santa Teresita? Sobre todo ese espíritu de equipo y de sentimiento de pertenencia. Además de la intensidad, porque al final, el fútbol aficionado es lo que es. Entonces, creo que lo primordial para que un equipo sea competitivo es que pelee todos los partidos con el cuchillo entre los dientes y especialmente en nuestro campo, que es de dimensiones reducidas, donde hay pocos espacios y los segundos balones son clave ". ¿Ha tenido contacto con los que serán sus jugadores? Sí, porque la idea era mantener todos los jugadores que había, lo que pasa que por circunstancias algunos salieron. A partir de la base del equipo hay que hacer algunas incorporaciones como son el regreso de Faría y Rubén, a los que se unen Juan Maceiras; Paulo, del Velle B; Marco, de los juvenil del Ourense CF; y Mateo y Pablo Míguez, que suben de los juveniles. Contar con la cantera, como son los casos de Mateo y Pablo Míguez, es parte de nuestra idiosincrasia, porque al final muchos de los jugadores del primer equipo pasaron por la base en algún momento, creo que es una manera de seguir creando ese sentimiento de pertenencia. ¿Le han dejado el listón alto? Joder y tanto (risas). No va a ser fácil de superar, pero por trabajo y ganas no va a quedar. La ilusión es máxima porque desde que comencé a entrenar aquí, éste era un sueño que tenía en el club de toda mi vida y ahora que lo he logrado quiero aferrarme a eso. Esas ganas e ilusión que tengo las voy a transmitir a los jugadores para dar todo lo máximo e intentar quedar lo mejor posible en la Liga. ¿Cómo ha llevado este tiempo de competición en la base bajo unas circunstancias tan complejas por el coronavirus? Al principio había muchas dudas mientras estaba trabajando al frente del equipo juvenil, porque había que entrenar en grupos reducidos y todo el tiempo utilizando la mascarilla. Al final se pudo salir a competir y el comportamiento de los chavales con el protocolo fue espectacular. En líneas generales fue un gran año en lo personal, como para el resto de los equipos de la cantera del Santa Teresita.