El Ourense visita el domingo en el Heliodoro Rodríguez López al Tenerife, el rival más temible en el feudo más inexpugnable. Y es que el equipo tinerfeño no sólo es el líder del grupo con 41 puntos, dos más que el Real Oviedo, segundo, y 13 más que el Ourense, duodécimo, si no que además es el mejor equipo como local ya que lleva ocho victorias y tres empates, sumando en casa 27 puntos, por 26 el Leganés y 24 el Real Oviedo (canarios y asturianos son los únicos que todavía no perdieron este curso como locatarios).
Con el apartado deportivo a pleno y correcto funcionamiento, la actualidad del conjunto isleño pasa por su frenética actividad en los despachos. Cinco son las bajas que lleva dadas en lo que va de mercado invernal (Lempereur al Louviere de la Tercera belga, Germán y Abel cedidos al Guijuelo, Zambrano al San Roque de Lepe y Ayoze cedido ayer mismo al cuadro vecino del C.D. Marino de Los Cristianos), y otras dos las que se esperan (Víctor Bravo y Amado). Por contra, 'sólo' realizaron un fichaje, el del delantero Ochoa, del Guijuelo.
La entidad tinerfeña trata de poner toda la carne en el asador para recuperar cuanto antes la división de plata del fútbol nacional que perdieron hace dos campañas, pero no a cualquier precio. El presupuesto del club bajó considerablemente al de la pasada campaña, cuando ya estaba en Segunda B (1,2 millones). En la dirección deportiva tenían claro que la única forma de reforzar la plantilla era aligerando el actual grupo de jugadores. Y vaya si lo ha hecho.
Con siete bajas proyectadas (cinco desarrolladas y dos en vías) y sólo una llegada, parece claro que en las siguientes fechas la plantilla tinerfeña tendrá nuevos elementos.
UN CENTRAL
El centro de la defensa parece la próxima línea a reforzar. La llegada de Borrego, jugador del San Fernando, parecía casi hecha, pero el acuerdo no fue total y el jugador que ahora apunta al club del Heliodoro Rodríguez López es Iván Amaya, zaguero de 34 años que comenzó su carrera en la elite en el Rayo Vallecano y la continuó en el Atlético de Madrid, Español, Getafe, Ciudad de Murcia, Elche, Granada, Murcia, Apollon chipriota y ahora está en el equipo de la AFE.
La entidad tinerfeña trata de poner toda la carne en el asador para recuperar cuanto antes la división de plata del fútbol nacional que perdieron hace dos campañas, pero no a cualquier precio. El presupuesto del club bajó considerablemente al de la pasada campaña, cuando ya estaba en Segunda B (1,2 millones). En la dirección deportiva tenían claro que la única forma de reforzar la plantilla era aligerando el actual grupo de jugadores. Y vaya si lo ha hecho.
Con siete bajas proyectadas (cinco desarrolladas y dos en vías) y sólo una llegada, parece claro que en las siguientes fechas la plantilla tinerfeña tendrá nuevos elementos.
UN CENTRAL
El centro de la defensa parece la próxima línea a reforzar. La llegada de Borrego, jugador del San Fernando, parecía casi hecha, pero el acuerdo no fue total y el jugador que ahora apunta al club del Heliodoro Rodríguez López es Iván Amaya, zaguero de 34 años que comenzó su carrera en la elite en el Rayo Vallecano y la continuó en el Atlético de Madrid, Español, Getafe, Ciudad de Murcia, Elche, Granada, Murcia, Apollon chipriota y ahora está en el equipo de la AFE.
