Vane Sotelo: “Volveré algún día a Galicia”

Vanessa Sotelo tiene 25 años y lleva toda una vida en la élite del deporte nacional: tres veces nominada a mejor jugadora del mundo de fútbol sala, campeona de Europa con la selección española, Bota de Oro en los Torneos Mundiales de Costa Rica y Guatemala y en el Europeo de Portugal, en el que logró el título y fue declarada la “MVP” del torneo… Y lo que le queda por delante. La actual jugadora del Futsi, junto al Burela uno de los dos grandes del fútbol sala femenino nacional, lleva tres meses disputando un partido diferente, su recuperación de la rotura del ligamento cruzado de la rodilla, lesión que se produjo en pretemporada jugando con la selección española un amistoso ante su exequipo, el Alcorcón. Sotelo se pasó ayer por el Podcast Grada 988 de La Región, en el que conversó con Jorge Ron, Xabi Blanco y Javier Rey. Con su faceta competitiva a un lado, habló de sus inicios en el fútbol y el fútbol sala, de la evolución del deporte femenino, de la posibilidad de que el futsal sea disciplina olímpica y hasta de la rivalidad Envialia-Cidade. “Empecé jugando en un equipo masculino y en toda la liga solo estábamos dos niñas. Por suerte, aunque faltan muchos pasos se ha mejorado y ahora ya hay muchas más. Es una pasada el crecimiento del fútbol femenino y un éxito como el de Alexia Putellas (Balón de Oro 2021) es un espaldarazo enorme. El deporte femenino necesita visibilidad. ¿Yo en el fútbol 11? No me lo planteo. Tener éxito en el fútbol sala no significa triunfar en el fútbol. Estoy feliz aquí con lo que he logrado. Nunca me imaginé que llegaría a debutar en Primera o que jugaría en la selección española y ganaría un Europeo”. Hablando de visibilidad, para el fútbol sala ser olímpico sería el empujón definitivo para su profesionalización. “Ves que están entrando deportes nuevos al programa olímpico y la verdad no entiendo por qué el fútbol sala no lo es. No sé si será porque ya está el fútbol. En 2018 estuvo en los Juegos Olímpicos de la Juventud y ojalá en un futuro pueda ser olímpico”. Ella lo vivió en los dos bandos y sabe que el derbi Envialia-Cidade “es especial. La rivalidad está bien, aunque a veces sobrepasó los límites porque parece que hay gente que le gusta llevarla ahí. Tengo amigas en los dos equipos, pero hay cosas que no me identifican con él. En todo caso, debemos quedarnos que para una ciudad como Ourense tener ese derbi en la élite es un lujo. Hasta en Madrid la semana del derbi se habla de él. Y al hablar de Ourense, la pregunta estaba botando… ¿Ficharías por el Envialia? A día de hoy no, pero no digo que nunca volvería”. Por el momento, su sitio está en el Futsi. “Volveré algún día a Galicia, me gustaría acabar jugando cerca, aunque ahora todavía no me veo aquí, quiero seguir en Madrid”.