El Barcelona se clasificó para los octavos de final de la Liga de Campeones al ganar con suma facilidad en Moscú, 0-3. La resistencia del Spartak de Unai Emery duró únicamente lo que tardó el Barcelona en marcar el primer gol.
En los primeros minutos los rusos salieron a morder y realizaron varias incursiones con cierto peligro, aunque no llegaron a incordiar a Valdés. Al cuarto de hora apareció Messi, la defensa despejó y el rechace lo cazó Alves.
Tras unos minutos aturdido por el gol, el Spartak tuvo la igualada, pero el checo Suhi desaprovechó una inmejorable ocasión al disparar fuera cuando se encontraba solo en el área.
No se había llegado a la media hora cuando el Barcelona hizo el segundo, un contragolpe conducido por Iniesta, cuyo disparo fue repelido por el portero y remachado por Messi.
Ahí se acabó la oposición de los locales. Por contra, Messi cerró la escabechina del primer tiempo al quedarse solo ante el portero, regatearlo y marcar a puerta vacía.
Tras unos minutos aturdido por el gol, el Spartak tuvo la igualada, pero el checo Suhi desaprovechó una inmejorable ocasión al disparar fuera cuando se encontraba solo en el área.
No se había llegado a la media hora cuando el Barcelona hizo el segundo, un contragolpe conducido por Iniesta, cuyo disparo fue repelido por el portero y remachado por Messi.
Ahí se acabó la oposición de los locales. Por contra, Messi cerró la escabechina del primer tiempo al quedarse solo ante el portero, regatearlo y marcar a puerta vacía.
