El francés Romain Grosjean, sancionado con una carrera de suspensión por haber causado el accidente que dejó fuera a Fernando Alonso en Bélgica, frenó la marcha triunfal del doble campeón del mundo español, que aspira a lograr este año su tercera corona.
No es la primera vez que Grosjean, nacido en Ginebra hace 26 años pero que compite como francés, se cruza en la trayectoria del líder del Mundial de Fórmula 1. Ambos fueron compañeros de equipo en siete carreras durante la segunda etapa del asturiano en Renault, escudería con la que logró sus dos títulos mundiales (2005 y 2006).
En 2009 fue Grosjean el que sustituyó al brasileño Nelsinho Piquet después que Flavio Briatore, patrón de la escudería francesa, decidiese despedir al sudamericano, después del GP de Hungría.
El francés compartió equipo con Fernando las últimas siete citas de ese año, las de Europa (en Valencia), Bélgica, Italia, Singapur, Japón, Brasil y Abu Dhabi. No puntuó en ninguna de ellas y su mejor resultado fue el decimotercer puesto que logró en Interlagos.
Grosjean no siguió en la Fórmula 1 al año siguiente pero encontró el camino de retorno tras adjudicarse la temporada pasada el campeonato GP2, lo que le sirvió para ganarse un asiento en Lotus.
Hasta la fecha, Grosjean había obtenido durante este curso los mejores resultados de toda su carrera, al haber subido tres veces al cajón, tercero en Bahrein e igualmente tercero en Hungría, la última carrera disputada antes del parón vacacional del mes de agosto. A esos puestos se añadía además el cuarto que firmó en Montmeló durante el GP de España.
En Spa-Francorchamps, sin embargo, en una maniobra temeraria, Grosjean arruinó lo que posiblemente hubiera sido un segundo puesto de Alonso (atendiendo a los datos que maneja Ferrari), que llevaba preparado su monoplaza para volar en el primer y el tercer sector, como también se desprende de la carrera de su compañero brasileño Felipe Massa, que en Spa concluyó quinto.
Por culpa de la desmedida acción de Grosjean, que pudo haber tenido consecuencias trágicas, Alonso no sólo no engrosó su liderato (circunstancia que así hubiese sucedido de haber acabado detrás de Button), si no que lo vio reducido de los 40 puntos de ventaja sobre Webber a los 24 ahora sobre Vettel.
Grosjean cortó la racha triunfal de Alonso, que había firmado, optimizando recursos, una primera parte de campeonato impecable, con victorias en Malasia, Valencia y Alemania; dos segundos puestos, en Barcelona y Silverstone; y un tercero en las calles de Mónaco.
ACEPTACIÓN DE LA SANCIÓN
Tanto Grosjean como su equipo, conscientes del grave error cometido, no recurrieron la sanción que no le permitirá correr el domingo en Monza, sede del GP de Italia, que vino acompañada de una multa de 50.000 euros.
En 2009 fue Grosjean el que sustituyó al brasileño Nelsinho Piquet después que Flavio Briatore, patrón de la escudería francesa, decidiese despedir al sudamericano, después del GP de Hungría.
El francés compartió equipo con Fernando las últimas siete citas de ese año, las de Europa (en Valencia), Bélgica, Italia, Singapur, Japón, Brasil y Abu Dhabi. No puntuó en ninguna de ellas y su mejor resultado fue el decimotercer puesto que logró en Interlagos.
Grosjean no siguió en la Fórmula 1 al año siguiente pero encontró el camino de retorno tras adjudicarse la temporada pasada el campeonato GP2, lo que le sirvió para ganarse un asiento en Lotus.
Hasta la fecha, Grosjean había obtenido durante este curso los mejores resultados de toda su carrera, al haber subido tres veces al cajón, tercero en Bahrein e igualmente tercero en Hungría, la última carrera disputada antes del parón vacacional del mes de agosto. A esos puestos se añadía además el cuarto que firmó en Montmeló durante el GP de España.
En Spa-Francorchamps, sin embargo, en una maniobra temeraria, Grosjean arruinó lo que posiblemente hubiera sido un segundo puesto de Alonso (atendiendo a los datos que maneja Ferrari), que llevaba preparado su monoplaza para volar en el primer y el tercer sector, como también se desprende de la carrera de su compañero brasileño Felipe Massa, que en Spa concluyó quinto.
Por culpa de la desmedida acción de Grosjean, que pudo haber tenido consecuencias trágicas, Alonso no sólo no engrosó su liderato (circunstancia que así hubiese sucedido de haber acabado detrás de Button), si no que lo vio reducido de los 40 puntos de ventaja sobre Webber a los 24 ahora sobre Vettel.
Grosjean cortó la racha triunfal de Alonso, que había firmado, optimizando recursos, una primera parte de campeonato impecable, con victorias en Malasia, Valencia y Alemania; dos segundos puestos, en Barcelona y Silverstone; y un tercero en las calles de Mónaco.
ACEPTACIÓN DE LA SANCIÓN
Tanto Grosjean como su equipo, conscientes del grave error cometido, no recurrieron la sanción que no le permitirá correr el domingo en Monza, sede del GP de Italia, que vino acompañada de una multa de 50.000 euros.
