Escritor y presidente de la ONG ’Somos 1’

José Luis Olaizola: ’La literatura me llevó a la solidaridad’

’De la literatura a la entrega solidaria’ es el título de la conferencia que el escritor José Luis Olaizola impartirá mañana en Ourense dentro del Foro La Región.
¿De qué hablará en la conferencia que impartirá mañana en Ourense? Expondré el problema que se me plantea como escritor, con 65 libros publicados y más de 30 años dedicados a la literatura, cuando una de mis novelas, ’Cucho’, que se tradujo al tailandés, me llevó a conocer el drama de la prostitución infantil en ese país y me vi abocado a entregarme a la solidaridad, creando una ONG.

Usted afirma que su vocación es la literatura. Sin embargo, se formó como abogado. ¿Por qué? Aunque mi vocación siempre ha sido la escritura, por cultura de la época -era inimaginable que un joven se dedicase a la literatura- y buen consejo de mi familia opté por esta carrera, con la que ayudé a muchos a salir de la cárcel. Pero, en el fondo de mí latía la literatura.

¿Qué le llevó a dejar esta profesión para dedicarse a escribir? Tuve mucha suerte con los premios. En 1976 obtuve el galardón Ateneo de Sevilla con ’Planicio’ y en 1983 gané el Planeta con ’La guerra del general Escobar’, un libro muy importante en mi vida porque me consagró como escritor, permitiéndome dedicarme plenamente a la literatura como escritor profesional, abandonando el ejercicio de la abogacía. Cuando me inicié en la literatura estaba al margen de las editoriales y pensé que el camino natural para darme a conocer eran los premios. Hoy están descalificados, pero hace 30 años era el único medio y estoy muy agradecido a ellos, porque me han permitido llegar a un número de lectores razonable que me permite seguir escribiendo.

¿Cómo se ve como escritor? Soy un escritor que no pretende cambiar el mundo, ni mucho menos. Para mí lo más importante es entretener a la gente. Aunque tengo un sentido cristiano de la vida, no soy un escritor católico sino un cristiano que escribe y eso aflora en mi obra.

Pero, desde hace cinco años preside una ONG.

’Cucho’ es un libro insigni ficante de 50 páginas, el más corto de mis obras. Sin embargo, me ha dado grandes satisfacciones. Gané con él un premio en Francia al mejor libro del año y se tradujo a diversos idiomas. Pero lo más importante vino al ceder gratuitamente los derechos para su traducción al tailandés. Nunca antes se me había ocurrido pensar en presidir una ONG y ahora es una actividad que me lleva tanto tiempo como escribir y con la que ya hemos sacado del drama de la prostitución a mil niñas, que ya están escolarizadas, y 30 de ellas camino de la universidad.

¿Cuál es su reto al frente de esta ONG? Estamos implicados en ella mi mujer, mis hijos y yo. Nos centramos en la lucha contra la prostitución infantil en Tailandia y espero que mis hijos sigan trabajando en ella en el futuro.

¿Es un tema que preocupa a los españoles? No, en absoluto. Parte del problema que se vive en este país es por culpa del turismo sexual, que no en escasa medida se nutre de españoles.

¿Y qué respuesta están obteniendo? Generosísima. Parece ser que España es el país que, en proporción de población y medios, más aporta a actividades sin ánimo de lucro.

Ahora está en plena campaña promocional de su último libro ’Dios de Mayo de 1908’. ¿Cómo está siendo la acogida? Creo que buena. Es un libro con ocasión de los 200 años del luctuoso y heroico Alzamiento contra la invasión francesa. Es una novela -yo no soy ensayista ni historiador-, que se ciñe a los hechos reales e históricos con personajes de ficción.


Te puede interesar