El crimen ocurrió en Girona y en la vivienda estaba otra niña de seis años

Decapita a su hija de dos años 'por orden del diablo'

El parricida tras su detención (Foto: ROBIN TOWNSEND)
Una niña de dos años fue decapitada supuestamente por su padre en un piso de la calle Oviedo de Girona poco después del mediodía de ayer. El presunto parricida, ya detenido, acabó con la vida de su hija en presencia de una hermana de esta, de seis años, que en el momento de los hechos también se encontraba en el domicilio familiar.
Según las mismas fuentes, el padre de la niña, de origen latinoamericano, avisó por teléfono a los servicios de emergencia de lo ocurrido y alegó que el demonio le había incitado a cometer el asesinato y que este todavía se encontraba en la casa. En el momento en el que iba a ser esposado, el padre de la niña comenzó a emitir sonidos guturales, circustancia que hizo que varios Mossos d'Esquadra tuvieran que intervenir. Posteriormente fue sedado por personal del Servicio de Emergencia Médica.

El hombre participó posteriormente en la reconstrucción del crimen, con el cadáver de su hija presente, hecho poco habitual, ya que normalmente este tipo de protocolos tienen lugar una vez el cuerpo fue retirado.

La madre de la niña decapitada se encontaba trabajando en el momento en el que ocurrieron los hechos, y cuando la llevaron a su casa, sufrió un ataque de nervios y tuvo que ser trasladada en ambulancia a un centro sanitario. Los servicios sociales se hicieron cargo de la hermana de la víctima, de seis años, que también se encontraba en la casa en el momento de los hechos,

Una vecina de un bloque vecino, que quiso desvelar su identidad, relató quee scuchó al supuesto autor del crimen gritar durante diez minutos 'cosas del demonio', y afirma que se asustó al pensar que sucedía algo grave, pero que, después, 'se hizo el silencio'. Un vecino del mismo bloque, Carlos, confirmó que la familia se había trasladado allí hace al menos dos años, que son los que él lleva viviendo en el edificio.

El alcalde de Girona, Carles Puigdemont, llamó a los vecinos a concentrarse a las puertas del Ayuntamiento para condenar el asesinato de la niña y apoyar a la familia de la víctima. Según indica el alcalde Puigdemont a través de su página web personal, el crimen es 'de tal monstruosidad que es imposible comprender la verdadera dimensión del hecho'. 'Cuando me ha llamado el jefe de la policía para informarme, he sentido un estremecimiento que todavía me dura y he pensado enseguida en la madre y la hermana de la víctima', señaló el alcalde de Girona.

El alcalde reclamó'solidaridad' con una familia 'que tiene que continuar adelante' e invitó a la población a participar en la concentración para que las familias se sienta entendida. 'Por su parte, el padre de la niña se encuentra en estos momentos detenido, y será el juzgado de guardia de Girona el que se haga cargo del caso.

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