La Guardia Civil ha desmantelado una red de importación y distribución de relojes de lujo falsificados en China que operaba en toda España y que vendía sus productos a través de Internet y también en joyerías, donde ofrecían incluso servicio posventa.
Según ha informado el instituto armado, las copias imitaban fielmente los relojes originales, lo que ha hecho necesario investigar su maquinaria interior para comprobar su falsedad.
La operación 'Rolex', desarrollada en los últimos nueve meses por la Guardia Civil de Pontevedra, ha culminado con la detención de dieciséis personas en las provincias de Valencia, Gijón, Barcelona, Cáceres, Almería y Pontevedra.
Los agentes han realizado cinco registros en los que se han localizado medio millar de réplicas de relojes de alta gama y de gran calidad, preparados para su venta en distintos puntos de toda España.
Uno de los cabecillas de la banda se encargaba de dar cobertura legal a la red y del servicio posventa de los relojes falsificados.
Otro de los detenidos estaba al frente de la distribución de las réplicas, a través de su propia relojería, Internet y una empresa fantasma.
La banda llevaba operando al menos cinco años y obtenía unos importantes beneficios, ya que vendía los relojes a un precio que, en ocasiones, triplicaba el valor de coste.
A todos los arrestados se les imputan delitos continuados contra la propiedad industrial y contra la propiedad intelectual.
En los seis registros practicados en Valencia, Pontevedra y en Gijón, los agentes han encontrado, además de los relojes falsificados, piezas de recambio, herramientas y sellos similares a los de las marcas plagiadas.
Uno de los almacenes de esta mercancía se localizó en el municipio de Sanxenxo donde el empresario pontevedrés, A.R.P.T., de 41 años, se encargaba de la distribución de los relojes en esta provincia y en otros puntos de la península.
La operación 'Rolex', desarrollada en los últimos nueve meses por la Guardia Civil de Pontevedra, ha culminado con la detención de dieciséis personas en las provincias de Valencia, Gijón, Barcelona, Cáceres, Almería y Pontevedra.
Los agentes han realizado cinco registros en los que se han localizado medio millar de réplicas de relojes de alta gama y de gran calidad, preparados para su venta en distintos puntos de toda España.
Uno de los cabecillas de la banda se encargaba de dar cobertura legal a la red y del servicio posventa de los relojes falsificados.
Otro de los detenidos estaba al frente de la distribución de las réplicas, a través de su propia relojería, Internet y una empresa fantasma.
La banda llevaba operando al menos cinco años y obtenía unos importantes beneficios, ya que vendía los relojes a un precio que, en ocasiones, triplicaba el valor de coste.
A todos los arrestados se les imputan delitos continuados contra la propiedad industrial y contra la propiedad intelectual.
En los seis registros practicados en Valencia, Pontevedra y en Gijón, los agentes han encontrado, además de los relojes falsificados, piezas de recambio, herramientas y sellos similares a los de las marcas plagiadas.
Uno de los almacenes de esta mercancía se localizó en el municipio de Sanxenxo donde el empresario pontevedrés, A.R.P.T., de 41 años, se encargaba de la distribución de los relojes en esta provincia y en otros puntos de la península.
