Los atentados se producen pocas horas después de que la banda asumiera sus últimos asesinatos

ETA hace estallar tres artefactos de escasa potencia en locales de Palma de Mallorca

Imagen de la playa de Molinar, acordonoda por la Policía. (Foto: Montserrat T. Díez)
Tres artefactos de escasa potencia explotaron ayer en Palma de Mallorca, sin causar daños personales, poco días después de que el pasado 30 de julio ETA colocara una bomba-lapa que mató a dos guardias civiles, Carlos Sáenz de Tejada García y Diego Salva Lezaun, en la capital mallorquina. ETA avisó con una llamada desde Francia a Radio-Taxi de Guipúzcoa de la colocación de los artefactos explosivos en restaurantes y bares de Palma, que explotarían entre las doce del mediodía y las seis de la tarde.
Tres artefactos de escasa potencia explotaron ayer causando daños materiales pero no heridos, en el centro de Palma de Mallorca, unas horas después de que ETA asumiera la autoría de varios atentados perpetrados en junio y julio, entre ellos el que costó la vida a dos guardias civiles hace 11 días en la misma isla. Pocas horas después, sobre las 11,30 horas, ETA hizo una llamada desde Francia a Radio-Taxi Guipúzcoa para avisar de la colocación de varios artefactos explosivos en restaurantes y bares de Palma de Mallorca, que explotarían entre las doce del mediodía y las seis de la tarde.

El primero de ellos hizo explosión a las 14,25 horas en el restaurante La Rigoletta del Paseo de Portitxol, frente a la playa de Can Pere Antoni, sin causar heridos, y que fue desalojado por el propietario tras la explosión. El artefacto era de pequeño tamaño y escasísima potencia y se encontraba al parecer en el interior de una mochila, oculta en el falso techo del baño de señoras, próximo a la cocina.

Desalojo

El segundo artefacto hizo explosión a las 16,03 en el bar-restaurante Enco, ubicado en el número 15 de la calle Vicari Joaquim Fuster, muy próximo al anterior, y tampoco causó heridos. Esta explosión tuvo lugar 40 minutos después de que los agentes desalojaran los bares y la playa del Portitxol, y al igual que la primera ocurrió en el cuarto de baño del local. Las personas que se encontraban allí en ese momento recibieron la instrucción de los agentes de que se marchasen del lugar ‘rápidamente’, lo que les obligó a dejar todas sus pertenencias en los establecimientos y en la playa, zonas que fueron rastreadas minutos más tarde por los Tedax.

El tercer artefacto hizo explosión a las 18,10 horas en los bajos comerciales de la plaza Mayor de Palma, también en unos baños, y no ocasionó heridos aunque la zona no había sido desalojada. Todo el perímetro de la Plaza Mayor de Palma permanecía a última hora de la tarde cortado al tráfico y a los peatones, con la presencia de numerosos agentes que rastreaban la zona y las proximidades del Parlamento balear.

En la playa del Portitxol, hora y media después de la explosión, varias personas seguían esperando para poder acceder a su vehículos.

El delegado del Gobierno en Baleares, Ramon Socías, confirmó la explosión de tres artefactos y dijo que se está investigando el origen de un cuarto estallido (al mediodía) en el bar Nica, situado en una céntrica avenida de Palma. Socias ha asegurado que los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado trabajan tanto con la hipótesis de que quienes hayan colocado los artefactos sigan en Mallorca como también de que hubieran abandonado la isla ‘y alguna de esas bombas se hubiera activado con temporizador’.

De hecho los temporizadores serán los encargados de dar respuesta a la pregunta que se hacen los expertos en la lucha antiterrorisata desde el pasado 30 de julio: ¿permanecen en la isla los etarras que asesinaron a dos guardias civiles? Será también decisivo para contestar a la pregunta el lugar elegido por los terroristas para colocar los artefactos, porque si estaban ‘bien ocultos, si los habían colocado de forma que fuera prácticamente imposible apreciarlos’ su intención habría sido la de que les diera tiempo para escapar, con lo que la hipótesis más probable sería la de que estarían fuera. Si las hubieran situado ‘de forma chapucera’, en algún lugar visible para los especialistas, la balanza se inclinaría por situar a los etarras todavía en la zona.

‘Menos mal que no he ido al baño’

‘Menos mal que no he ido al baño en ese momento porque no lo cuento’, relató Gonzalo Peña, que se encontraba comiendo en el restaurante La Rigoletta cuando ha estallado uno de los dos artefactos colocados por ETA esta mañana en dos locales de Portixol, en Palma de Mallorca. Según este testigo, hacía solo cinco minutos que había llegado al restaurante cuando ha escuchado un ‘golpe fuerte y seco’ proveniente de la zona de la cocina y los baños, aunque en un primer momento no imaginó que se trataba de una bomba de escasa potencia colocada en el baño de señoras.

‘Todo ha temblado un poco y al principio pensé que era un portazo’, indicó el testigo, residente en uno de los bloques de viviendas donde se encuentra el restaurante y que aún no ha podido entrar en su casa, quien luego, al ver ‘humo negro’ y oler a ‘pólvora’ se ha dado cuenta de que podía ser un explosivo. Como Gonzalo, numerosos vecinos y empleados de los restaurante de la zona desalojados tras la bomba (cuatro locales en total) fueron desalojados de sus hogares y de sus lugares de trabajo.

Por otra parte, el Rey se mantiene informado desde el primer momento por el Gobierno sobre la evolución de los acontecimientos tras los atentados, que no alterarán la agenda de Don Juan Carlos y del resto de la Familia Real en la isla.

El presidente balear anima a los ciudadanos a seguir con su forma de vida

El presidente del Govern balear, Francesc Antich, afirmó que ‘la mejor respuesta’ ante las explosiones es seguir con ‘la normalidad’ y que los ciudadanos de Baleares no cambien su forma de vida. El PSOE transmitió, en un comunicado, su ‘más absoluta condena’ y su ‘infinita repulsa’ a las acciones terroristas y ha dicho a ETA que ‘tiene que saber que jamás conseguirá sus objetivos’. El PP también condenó unos atentados que ‘ponen de manifiesto la voluntad de ETA de seguir adelante con su carrera criminal’, pero que reafirman a los demócratas ‘en nuestra voluntad de lograr la derrota definitiva de la banda asesina, utilizando todos los instrumentos del Estado de Derecho’.

En nombre del Gobierno Vasco, su consejero de Interior, Rodolfo Ares, advirtió a ETA de que ‘no conseguirá ninguno de sus fines’, así como de que los autores de los atentados de Palma de Mallorca ‘serán detenidos’. Eusko Alkartasuna y Aralar han pedido a la banda que abandone la lucha armada, ya que le pueblo vasco no la apoya, mientras que el PNV, le ha expresado su ‘desprecio’ y el de ‘la mayoría de la sociedad vasca’.

El portavoz del Grupo Parlamentario Catalán (CiU) en el Congreso de los Diputados, Josep Antonio Duran i Lleida, ha condenado las acciones terroristas perpetradas hoy por ETA ha recalcado que la banda terrorista no doblegará al Estado de derecho. Por su parte, el secretario general de ICV, Joan Herrera, ha dicho que ‘la solución del conflicto en Euskadi sólo es posible por la vía pacífica y democrática’ y ha reclamado la máxima unidad política.

La banda terrorista asume la autoría de los últimos ataques

La banda terrorista ETA asumió, en un comunicado en Gara, los últimos atentados perpetrados en los meses de junio y julio y que le costaron la vida al inspector Eduardo Puelles y a los guardias Civiles Carlos Sáenz de Tejada y Diego Salva. Los etarras, a pesar de los atentados, refieren que ‘no quiere imponer ningún proyecto’ y que lo que buscan es ‘una solución política y dialogada’. ETA se hace responsable, asimismo, de la explosión de la furgoneta bomba contra la casa cuartel de la Guardia Civil en Burgos, ocurrida el pasado 29 de julio, que causó 65 heridos leves, y de la provocada 19 días antes ante la sede del PSE en Durango y que provocó daños materiales.

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