El PP mantuvo ayer que en su grupo parlamentario no hay fisuras ante la reforma de la ley del aborto, algo de lo que en el PSOE está convencidos muchos de los populares están 'avergonzados' y por ello le retó a que se pueda votar en secreto su retirada urgente e inmediata en un pleno extraordinario en enero.
De esas voces críticas, la última era la del diputado gallego y número dos de Nuevas Generaciones, Javier Dorado, que en su cuenta de Twitter señaló esta semana que 'el Estado no debe complicar más las cosas' en relación a la protección de los embarazos cuando existe malformación del feto. A su entender, la noticia de una malformación, 'muchas veces sin saber en qué magnitud, es un drama para la pareja'.
Varios cargos del PP no han ocultado sus reticencias con el texto presentado el 20 de diciembre por el ministro Ruiz Gallardón. Así lo han hecho el presidente gallego, Alberto Núñez Feijóo, y el extremeño José Antonio Monago; la delegada del Gobierno en Madrid, Cristina Cifuentes, o la alcaldesa de Zamora, Rosa Valdeón.
PP y PSOE continuaron ayer el cruce de declaraciones sobre la reforma, muy criticada por los socialistas, pero también por IU por considerarla, en palabras de Gaspar Llamazares, 'cavernaria, oscurantista e inquisitorial'. Una opinión que hizo al PSOE e IU pedir una reunión inmediata de la Diputación Permanente para que acuerde la comparecencia en el Congreso de los ministros de Justicia y Sanidad, Alberto Ruiz Gallardón y Ana Mato, para que expliquen este anteproyecto. Además, el PSOE pidió también que comparezca antes de febrero la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, bajo cuya presidencia del Consejo se aprobó este 'vergonzoso' anteproyecto, según dijo Soraya Rodríguez.
'SIN FISURAS'
No son de la misma opinión en las filas del PP, según el secretario general del grupo popular en el Congreso, José Antonio Bermúdez de Castro. 'No va a haber fisuras' a la hora de apoyar la reforma de la ley del aborto, porque el partido tiene una 'posición clara' que plasmó en su programa electoral, según aseguró. De esta forma, descartó que vaya a haber parlamentarios populares que no apoyen esta reforma. Incluso aseguró que los diputados del PP 'siempre votan libremente' aunque, añadió, 'en coherencia con lo que defiende' el programa del partido.
La posición de los populares sobre el aborto 'es clara' y así se plasmó en congresos y en los órganos de decisión que aprobaron el programa, insistió el secretario general, quien también aseguró que no hay temor a que vaya a haber diputados disidentes.
En el PSOE no lo tienen tan claro y por eso, tal y como precisó Soraya Rodríguez, su grupo registró ayer una proposición no de ley para que se celebre este mes un pleno extraordinario, en el que se aborde la retirada del anteproyecto y en el que el voto sea secreto. Invitó además a presidentes autonómicos como Monago, que se manifestó en contra de la reforma, a reunirse con los diputados de sus circunscripciones para emplazarles a oponerse a la iniciativa.
Varios cargos del PP no han ocultado sus reticencias con el texto presentado el 20 de diciembre por el ministro Ruiz Gallardón. Así lo han hecho el presidente gallego, Alberto Núñez Feijóo, y el extremeño José Antonio Monago; la delegada del Gobierno en Madrid, Cristina Cifuentes, o la alcaldesa de Zamora, Rosa Valdeón.
PP y PSOE continuaron ayer el cruce de declaraciones sobre la reforma, muy criticada por los socialistas, pero también por IU por considerarla, en palabras de Gaspar Llamazares, 'cavernaria, oscurantista e inquisitorial'. Una opinión que hizo al PSOE e IU pedir una reunión inmediata de la Diputación Permanente para que acuerde la comparecencia en el Congreso de los ministros de Justicia y Sanidad, Alberto Ruiz Gallardón y Ana Mato, para que expliquen este anteproyecto. Además, el PSOE pidió también que comparezca antes de febrero la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, bajo cuya presidencia del Consejo se aprobó este 'vergonzoso' anteproyecto, según dijo Soraya Rodríguez.
'SIN FISURAS'
No son de la misma opinión en las filas del PP, según el secretario general del grupo popular en el Congreso, José Antonio Bermúdez de Castro. 'No va a haber fisuras' a la hora de apoyar la reforma de la ley del aborto, porque el partido tiene una 'posición clara' que plasmó en su programa electoral, según aseguró. De esta forma, descartó que vaya a haber parlamentarios populares que no apoyen esta reforma. Incluso aseguró que los diputados del PP 'siempre votan libremente' aunque, añadió, 'en coherencia con lo que defiende' el programa del partido.
La posición de los populares sobre el aborto 'es clara' y así se plasmó en congresos y en los órganos de decisión que aprobaron el programa, insistió el secretario general, quien también aseguró que no hay temor a que vaya a haber diputados disidentes.
En el PSOE no lo tienen tan claro y por eso, tal y como precisó Soraya Rodríguez, su grupo registró ayer una proposición no de ley para que se celebre este mes un pleno extraordinario, en el que se aborde la retirada del anteproyecto y en el que el voto sea secreto. Invitó además a presidentes autonómicos como Monago, que se manifestó en contra de la reforma, a reunirse con los diputados de sus circunscripciones para emplazarles a oponerse a la iniciativa.
