CONTROVERTIDO DEBATE

Rajoy invita al presidente catalán a plantear una reforma constitucional

El pleno de la Cámara Baja rechaza la propuesta de referéndum en Cataluña entre ofertas de diálogo de Gobierno y oposición.

No hubo sorpresas y el Congreso daba ayer un sonoro portazo a la propuesta de consulta soberanista de Cataluña, aunque, eso sí, el jefe del Gobierno, Mariano Rajoy, enseñó el camino a quienes no están de acuerdo con la actual estructura territorial: proponer una reforma de la Constitución.

Como se esperaba, la proposición de ley del Parlament de Cataluña que pedía la transferencia a la Generalitat de la competencia para convocar el referendo fue tumbada con una amplísima mayoría de la Cámara por 299 votos en contra, 47 votos a favor y una abstención.

Una derrota que también tuvo su reflejo en los propios diputados catalanes, donde la suma de los votos del PSC y el PPC fue superior al del conjunto de las formaciones nacionalistas catalanas.

A pesar de este portazo, el presidente del Gobierno no ha cerrado la puerta a debatir una posible reforma de la Constitución, si es eso lo que quieren los partidos catalanes, lo que no quiere decir que el Ejecutivo la apoye. "Hay una puerta abierta de par en par para aquellos que no estén conformes con el actual estado de las cosas, iniciar los trámites para una reforma de la Constitución", proclamó.

Dirigiéndose al presidente de la Generalitat, el gran ausente en el Congreso, Rajoy dejó claro que el problema catalán no se soluciona tomando "quinientos cafés" con Mas, porque falta la "potestad que la Constitución nos niega". El presidente del Gobierno ha aprovechado también para criticar que los defensores de la independencia no expliquen sus consecuencias.

Razones que no han convencido en modo alguno a los tres portavoces del Parlament -Jordi Turull (CiU), Marta Rovira (ERC) y Joan Herrera (ICV)- que lanzaron una advertencia pese al no del Congreso: "El camino emprendido en Cataluña no tiene retorno".

El portavoz parlamentario de CiU, Josep Antoni Duran Lleida, dijo por su parte a Rajoy que su formación está dispuesta a negociarlo "todo" y planteó una reforma constitucional como una de las soluciones al encaje de Cataluña.

Reforma de la Constitución que también planteó el líder del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, que abogó por una actualización del "pacto constituyente" que "recoja las aspiraciones y singularidades" de Cataluña. Rubalcaba, que se mostró "absolutamente en desacuerdo" con la independencia de Cataluña, propuso esa reforma constitucional como solución a los "graves problemas de convivencia" que, a su juicio, existe entre los catalanes y el resto de España.

Se abren ahora varias alternativas para el plan soberanista. En primer lugar, se intentará poner en marcha la ley de consultas que ya está en el Parlament de Cataluña y, si ésta es paralizada por un seguro recurso del Gobierno ante el Tribunal Constitucional (TC), una elecciones plebiscitarias.

Te puede interesar