LAS CUENTAS CLARAS

Una veintena de países ya se rinden a la castaña confitada que elabora el grupo Cuevas

El procesado de castañas es compeljo y dura no menos de diez días.
photo_camera El procesado de castañas es complejo y dura no menos de diez días.

Este año la producción ha crecido un 20% y China es uno de los mercados con más posibilidades para el Marrón Glacé.

La temporada de castaña presupone un buen año para las empresas que se dedican a su venta en fresco o transformación. Es el caso de Marrón Glacé del grupo Cuevas, que tiene estos días una gran carga de trabajo que se prolongará hasta mediados de enero. Durante estas semanas la factoría del polígono de San Cibrao das Viñas está a pleno rendimiento, como lo reconoce Mayte González, gerente de la compañía, en una entrevista en el programa Las Cuentas Claras de Telemiño. 

La campaña de recogida ha sido mejor que la del año pasado, con unas previsiones de mejoría del 20% sobre el año pasado. Han influido en esta ocasión las altas temperaturas del verano y unos días de precipitaciones que se produjeron en septiembre. Cuevas prevé procesar en sus diferentes fases este año en torno a 800 toneladas de castaña, procedente sobre todo de zonas como Viana do Bolo, Manzaneda, A Gudiña o Riós, entre otras. Solo en años en los que la producción es escasa “nos aprovisionamos en otras comunidades españolas o Portugal”, como subraya Mayte González.

El 30% de la producción anual se suele dedicar a la exportación, con una veintena de países receptores de un producto de alta calidad y para un público exigente, como reconoce la propia gerente. A los mercados en los que la castaña confitada tenía una gran aceptación hay que sumar “otros del continente asiático, sobre todo en China, donde nos hemos introducido con paso firme”.

La actividad estos días es intensa en Cuevas Marrón Glacé para acometer la delicada labor de preparar y envasar el producto. Explica Mayte González que “el proceso es lento y requiere diez días en continua transformación”. Y es que la castaña pasa por ser un producto muy versátil desde el punto de vista comercial, hasta el punto que Cuevas procesa una veintena de presentaciones diferentes, aunque la que más tradición tiene y mayor relevancia exportadora es el Marrón Glacé. 

Te puede interesar