Bosch: “Según las aguas fecales, el covid ya circulaba en España el 15 de enero”

La importancia del análisis de las aguas residuales para el control y prevención de enfermedades. Esa fue la piedra angular del discurso de Albert Bosch, protagonista del Foro La Región celebrado este jueves a las 20,30 horas en la sala de conferencias de Afundación. Bosch, uno de los virólogos más reputados de toda España, es además presidente de la Sociedad Española de Virología, catedrático de Microbiología de la Universidad de Barcelona y coordinador del proyecto VATar (Vigilancia y Alerta Temprana en aguas residuales de covid) de los ministerios de Sanidad y Transición Ecológica. El ponente estuvo presentado por Juan García Costa, virólogo en el CHUO y vocal de la Sociedad Española de Virología. García Costa destacó del ponente su “amplio y prestigioso” currículo. Bosch comenzó su intervención definiendo un virus como “algo simple”: “Es un parásito muy pequeño y difícil de estudiar, intracelular y que depende de su infecciosidad para sobrevivir”. Citando a Brian Medawar, apuntó que “un virus es un grupo de malas noticias envueltas en proteínas”. El virólogo catalán hizo también una clasificación de virus que aparecen en materias fecales, tales como los neurotrópicos, hepatotrópicos, enterotrópicos, pneumotrópicos y multitrópicos. Uno de esos virus que se pueden observar en las heces es, precisamente, el SARS-CoV2, el causante del coronavirus. El ponente, utilizando los casos del poliovirus o del enterovirus A71, explicó cómo que se erradique un virus no significa “que no pueda nacer otro que origine consecuencias similares al erradicado”. Además, también hizo mención a las variantes, explicando cómo un virus es capaz de adaptarse a nuevas condiciones. Por otra parte, Bosch, detalló, empleando también el ejemplo del enterovirus, cómo funcionan los análisis de aguas residuales, subrayando que el objetivo de este análisis es hacer una prevención adecuada. “El susto grande me lo llevé cuando encontré el virus de la polio, erradicado en España desde antes del nuevo milenio”, advirtió. Esto se explica porque había un ciudadano paquistaní que se había vacunado contra este virus, y, mediante el análisis masivo, detectaron esta casuística. El covid en las heces “El virus del covid se excreta, lo que nos permite secuenciar masivamente esta enfermedad”, apuntó Bosch. Lo que dejó claro es que esta secuenciación de las aguas residuales es algo “complementario” a los análisis clínicos. Sobre la positividad, mostró un gráfico en el que esta aumentaba al ser secuenciada en heces, y permanecía más días. Esto se explica porque el virus “se multiplica” en el sistema digestivo. Por cada gramo de materia fecal se encuentran diez millones de virus. Bosch quiso mandar un mensaje de tranquilidad, remarcando que el covid no puede transmitirse a través del agua infectada como otros como el de la gastroenteritis. “Al no haber infectividad, un virus es inofensivo, no supone un riesgo”, sentenció. En los análisis de aguas fecales durante la primera ola, el grupo de investigación hizo análisis en dos depuradoras de Barcelona, muestreando a casi tres millones de personas. Los resultados obtenidos mostraban, entre otras cosas, la efectividad del confinamiento o la reexpansión del covid durante las fases de apertura. Recuperando otras muestras congeladas, Bosch aseguró que el virus ya circulaba en España el día 15 de enero de 2020, cuando el primer caso clínico se comunicó ya bien entrado febrero. Otro de los beneficios de estos análisis es la capacidad de detectar “puntos calientes de expansión”, siendo aconsejable realizar un cribado poblacional en barrios concretos en los que se están obteniendo datos preocupantes. A raíz de estos estudios y de la pandemia se creó el VATar, cuya misión es vigilar la presencia del virus del covid en las aguas residuales. “Una variante que ha perdido la guerra no puede regresar”, explicó Bosch, indicando que, por ejemplo, las variantes británica y ómicron comparten “seña de identidad”. “Las aguas residuales permiten apuntar tanto el inicio como el fin de las olas”, finalizó el virólogo catalán. “LAS VARIANTES SON ERRORES EN EL ARN DE LOS VIRUS” Albert Bosch indicó que las variantes del covid son “errores en la reproducción del ARN del virus, que no tiene capacidad de corregir dichos fallos”. Así, las variantes predominantes en los últimos tiempos son aquellas que “son capaces de adaptarse a las condiciones de vida”. “Un virus tiene que estar variando continuamente para seguir habitando a un individuo”, explicó el ponente. Paradójicamente, se refirió al SARS-CoV2 como un virus que “varía muy poco para ser un virus de ARN” y mostró un gráfico en el que se mostraban más de 50 mutaciones.