'Para nosotros ha muerto un vecino más del pueblo. Los agentes están completamente integrados, hacen su labor y sentimos que estamos protegidos por ellos, por lo que esta muerte nos ha dolido mucho', explicaba ayer un parroquiano de uno de los tres bares que hay en Covelo. A escasos metros, las banderas del Ayuntamiento ondeaban a media asta en señal de luto, mientras los vecinos comentaban en voz baja 'la desgracia' que había tenido lugar en A Cañiza. En el cuartel la actividad era incesante y las visitas del médico desde el cercano centro de salud muy frecuentes para asistir a los familiares y compañeros del fallecido.
El agente fallecido, Manuel Jorge Piñeiro Lorenzo, de 38 años y con tres hijos de corta edad, había sido destinado al cuartel de Covelo hace tres años después de ingresar en el cuerpo en 1999 y pasar por Barajas, Madrid, Guadalajara y Zamora. Su sueño era regresar a Galicia, cerca de Vigo si era posible, ya que era natural de Teis. Hacía poco que él y su mujer habían comprado una casa en Mouriscados, donde estaban haciendo algunos arreglos antes de trasladarse al nuevo domicilio coincidiendo con el bautizo del hijo pequeño, de apenas tres meses, que la pareja estaba preparando.
Ayer se reincorporaba a su puesto después de las vacaciones. El aviso de atraco en la sucursal de Caixa Galicia en A Cañiza era uno de sus primeros servicios. Eran las siete menos veinte. Poco después Manuel caía acribillado por cinco balazos. Tres le impactaron en el tórax y otros dos en el abdomen. Murió en el acto.
La noticia cayó en Covelo (3.399 habitantes) como una bomba. En el pueblo todos conocen a los agentes del cuartel. Para ellos 'son unos vecinos más'. Pero en el caso del fallecido además había que sumar que 'siempre saludaba cuando te lo encontrabas en la calle o en la piscina, donde iba mucho con sus hijos', explica José. La mujer de la víctima también se había adaptado a la vida del pueblo y ya hacía parte del Ampa del colegio.
En todos los centros y edificios oficiales de los concellos de O Covelo y A Cañiza ondean las banderas a media asta con crespones negros. Ambos municipios decretaron dos días de luto oficial por el asesinato de Piñeiro Lorenzo.
Los alcaldes, José Costa y César Mera, convocaron con carácter de urgencia, el primero, a las cinco de la tarde, y el segundo, a la una del mediodía, sendos plenos extraordinarios en los que las corporaciones al completo, 'condenaron rotundamente el acto criminal' a la vez que expresaban su rechazo más profundo y su más sentido pésame a la Guardia Civil y a la viuda del agente muerto, Eva María Hernández Lara.
La capilla ardiente se instalará hoy miércoles, a partir de las seis de la tarde, en el salón de plenos de la Casa Consistorial de Covelo. El funeral se oficiará mañana jueves, a las 11.00 horas, en la iglesia parroquial de Santiago de Covelo, tras lo cual, el féretro será trasladado al cementerio de Teis, en Vigo.
Ayer se reincorporaba a su puesto después de las vacaciones. El aviso de atraco en la sucursal de Caixa Galicia en A Cañiza era uno de sus primeros servicios. Eran las siete menos veinte. Poco después Manuel caía acribillado por cinco balazos. Tres le impactaron en el tórax y otros dos en el abdomen. Murió en el acto.
La noticia cayó en Covelo (3.399 habitantes) como una bomba. En el pueblo todos conocen a los agentes del cuartel. Para ellos 'son unos vecinos más'. Pero en el caso del fallecido además había que sumar que 'siempre saludaba cuando te lo encontrabas en la calle o en la piscina, donde iba mucho con sus hijos', explica José. La mujer de la víctima también se había adaptado a la vida del pueblo y ya hacía parte del Ampa del colegio.
En todos los centros y edificios oficiales de los concellos de O Covelo y A Cañiza ondean las banderas a media asta con crespones negros. Ambos municipios decretaron dos días de luto oficial por el asesinato de Piñeiro Lorenzo.
Los alcaldes, José Costa y César Mera, convocaron con carácter de urgencia, el primero, a las cinco de la tarde, y el segundo, a la una del mediodía, sendos plenos extraordinarios en los que las corporaciones al completo, 'condenaron rotundamente el acto criminal' a la vez que expresaban su rechazo más profundo y su más sentido pésame a la Guardia Civil y a la viuda del agente muerto, Eva María Hernández Lara.
La capilla ardiente se instalará hoy miércoles, a partir de las seis de la tarde, en el salón de plenos de la Casa Consistorial de Covelo. El funeral se oficiará mañana jueves, a las 11.00 horas, en la iglesia parroquial de Santiago de Covelo, tras lo cual, el féretro será trasladado al cementerio de Teis, en Vigo.
