Agentes de la Policía Nacional han detenido en Barcelona al jefe de una organización de ladrones de origen argentino especializados en cometer robos con violencia en joyerías. Al grupo, conocido como 'la banda del dogo', se le imputan cinco asaltos, en Vigo (Pontevedra), Albacete, Manresa (Barcelona) y Figueres (Girona), con los que lograron un botín aproximado de dos millones de euros.
La operación empezó en abril cuando los investigadores constataron que se habían producido diversos asaltos a joyerías en varias provincias en los que se empleó un mismo 'modus operandi'. Días antes del robo, algún integrante de la banda se dirigía al establecimiento y comprobaba las medidas de seguridad, la ubicación de las cajas fuertes y el número de empleados con que contaba.
En el momento de dar el golpe lo hacían en las horas de menor afluencia de público. Uno de los miembros del grupo accedía al local y franqueaba la puerta al resto de los integrantes. Una vez dentro, intimidaban a los empleados con armas blancas o de fuego y de manera violenta les tiraban al suelo o les llevaban a la trastienda donde eran inmovilizados. Mientras, el resto permanecía en el exterior realizando funciones de vigilancia y cobertura, al tiempo que facilitaban su huida a bordo de motos de gran cilindrada.
Los agentes averiguaron que se trataba de los responsables de un robo con armas de fuego cometido en una joyería de Vigo en el mes de mayo, en el que resultó herida su propietaria. Horas después del atraco, dos de los autores fueron arrestados en un control por la Guardia Civil en Puebla de Sanabria (Zamora), mientras que otro de los ladrones logró darse a la fuga. Se les intervinieron varios relojes procedentes del robo.
A partir de este hecho se estableció un equipo conjunto de investigación entre la Policía Nacional y la Guardia Civil que permitió averiguar que el grupo estaba liderado por un ciudadano argentino. Además se supo que lo integraban otros cinco individuos de la misma nacionalidad que tras el golpe de Vigo huyeron a su país.
A finales de verano se volvió a detectar su presencia en España. Se habían asentado en Catalunya, donde perpetraron dos atracos. Además, cometieron otro robo en Albacete, en la misma joyería que habían asaltado con anterioridad en el mes de mayo.
Los investigadores tuvieron conocimiento de que el jefe del grupo, O.A.O., de 54 años, se encontraba residiendo en la localidad barcelonesa de Villanova i la Geltrú y que se disponía a partir hacia Argentina de manera inminente. El dispositivo policial establecido por los agentes permitió su detención.
En el momento de dar el golpe lo hacían en las horas de menor afluencia de público. Uno de los miembros del grupo accedía al local y franqueaba la puerta al resto de los integrantes. Una vez dentro, intimidaban a los empleados con armas blancas o de fuego y de manera violenta les tiraban al suelo o les llevaban a la trastienda donde eran inmovilizados. Mientras, el resto permanecía en el exterior realizando funciones de vigilancia y cobertura, al tiempo que facilitaban su huida a bordo de motos de gran cilindrada.
Los agentes averiguaron que se trataba de los responsables de un robo con armas de fuego cometido en una joyería de Vigo en el mes de mayo, en el que resultó herida su propietaria. Horas después del atraco, dos de los autores fueron arrestados en un control por la Guardia Civil en Puebla de Sanabria (Zamora), mientras que otro de los ladrones logró darse a la fuga. Se les intervinieron varios relojes procedentes del robo.
A partir de este hecho se estableció un equipo conjunto de investigación entre la Policía Nacional y la Guardia Civil que permitió averiguar que el grupo estaba liderado por un ciudadano argentino. Además se supo que lo integraban otros cinco individuos de la misma nacionalidad que tras el golpe de Vigo huyeron a su país.
A finales de verano se volvió a detectar su presencia en España. Se habían asentado en Catalunya, donde perpetraron dos atracos. Además, cometieron otro robo en Albacete, en la misma joyería que habían asaltado con anterioridad en el mes de mayo.
Los investigadores tuvieron conocimiento de que el jefe del grupo, O.A.O., de 54 años, se encontraba residiendo en la localidad barcelonesa de Villanova i la Geltrú y que se disponía a partir hacia Argentina de manera inminente. El dispositivo policial establecido por los agentes permitió su detención.
