El conselleiro de Economía e Industria confía en el resultado de la subasta eléctrica
El conselleiro de Economía e Industria, Francisco Conde, confía en que el resultado de la subasta eléctrica que se celebra desde este lunes sea positivo para Alcoa, que ha acudido a la puja con una "expectativa clara" de mantener en funcionamiento las tres plantas de las que dispone en el norte peninsular: en Avilés (Asturias), San Cibrao (Lugo) y A Coruña.
Por su parte, el Gobierno gallego tiene la "expectativa" de que todas las empresas electrointensivas "puedan mantener" en 2015 el nivel de incentivos que tuvieron durante este año, de modo que el coste energético, a juicio del conselleiro, no debe significar "ninguna variación sustancial" que justifique el planteamiento de un despido colectivo, como trasladó la multinacional del aluminio a los trabajadores de A Coruña y Avilés.
En una entrevista concedida a Europa Press, el titular de Economía e Industria subraya que la Xunta ha "estado trabajando" para que el expediente de regulación de empleo "no se produzca" en la fábrica coruñesa de Alcoa, firma de la que valora el haber dado "un paso definitivo" al presentarse a esta subasta extraordinaria.
Al respecto, recuerda que la modificación del régimen de la interrumpibilidad buscó evitar que fuera declarado incompatible con el sistema de ayudas de estado de la Unión Europea y destaca que, en ese momento, "muchas empresas, entre ellas Alcoa, pidieron que se estableciera un sistema de subasta".
MANTENER LOS INCENTIVOS DE 2014
En este escenario, apela al Ejecutivo central, que "debe mantener el mismo nivel de incentivos de 2014", y concluye que, de ser así, la Administración autonómica espera que "todas las empresas consigan" la retribución que requieren para sus factorías.
Preguntado sobre si la forma de proceder de Alcoa constituye un chantaje al estado, Francisco Conde se limita a mostrarse "respetuoso" con "las estrategias de las empresas".
Al Gobierno de Mariano Rajoy le reclama "que haya un sistema de asignación de la interrumpibilidad que genere certidumbre y estabilidad", por la relevancia que eso tiene sobre decisiones empresariales relativas no ya solo a los puestos de trabajo, sino también "en términos de inversiones y de mejora de la competitividad".
"A partir de ahí, los posicionamientos de las empresas los tenemos que respetar. Pero la clave está en que el Gobierno sea capaz de trasladar esa certidumbre y estabilidad al conjunto de las empresas electrointensivas", incide.
En esta línea, resalta la importancia de que España "tiene que cumplir la normativa" y acerca de que el sistema esté "fundamentado en la concurrencia", pero valora que se contemplase la posibilidad de convocar una subasta extraordinaria, "para prever situaciones como la que se ha dado", precisamente, en la que hay empresas que no obtuvieron la retribución deseada en la puja ordinaria.
REDUCCIÓN DE PEAJES
En cuanto a las demandas de un marco diferenciado para la Comunidad gallega, en consonancia con lo establecido para el País Vasco, el responsable de la Xunta en materia económica e industrial niega que se haya aprobado una tarifa "específica" para un territorio.
"Lo único que ha establecido el Gobierno es una reducción de peajes en aquellas empresas que tienen una demanda de tensión entre 30 y 36 kilovatios", explica, y reitera que "no es una asignación territorial" sino que responde a la demanda de tensión y a la inversión que requiere, que es "mayor" en estos casos que para compañías cuya horquilla se encuentra entre 1 y 20 kilovatios, como es el caso de las pymes gallegas.
Sin embargo, en este extremo, llama la atención sobre que Galicia también cuenta con industrias que utilizan 66, 132 y 220 kilovatios, que, igualmente, "se benefician de un coste de peajes inferior".
Así las cosas, Conde resume su posicionamiento al afirmar que el Ejecutivo español "tiene que garantizar la accesibilidad a un coste de la energía competitivo al conjunto del tejido industrial". Y la Comunidad Autónoma, por su parte, seguirá reivindicándole "que tenga una política energética sensible" con el mismo, tanto con las industrias de pequeño y mediano tamaño como con las grandes.
REHABILITACIÓN Y RECIBO DE LA LUZ
En el ámbito de su responsabilidad, el conselleiro aboga por aprobar medidas "que deriven en un mayor ahorro y eficiencia energética", en el ámbito de las empresas y también en el de las familias, en el que avanza un plan de rehabilitación dotado de 3,7 millones de euros con el que la Administración gallega buscará impulsar la biomasa, la geotermia, la aerotermia y la fotovoltaica en 2015.
De forma paralela --y al margen de la orden para la implantación de calderas de biomasa, que estará dotada de otros 9 millones de euros el próximo ejercicio--, con este plan de rehabilitación la Xunta también perseguirá fomentar la demanda interna, en concreto, de la pizarra, el granito, la teja, la madera y la construcción metálica, mediante el recambio de tejados, cubiertas y fachadas de viviendas de la comunidad.
Además, se muestra confiado en que los gallegos pagarán menos por el recibo de la luz el próximo año, porque la "caída" durante "los dos últimos años" es un camino que, en su opinión, "no tiene retorno", después de los incrementos que atribuye al déficit de tarifa consecuencia de una política energética "desordenada" por parte del Partido Socialista.
