La Agencia Tributaria sólo aplicó sanciones en Galicia a un tercio de los emigrantes retornados que no declararon sus pensiones en el extranjero, informaron fuentes del organismo dependiente del Ministerio de Hacienda. Miles de gallegos fueron instados a declarar sus pensiones del extranjero y a acreditar los subsidios recibidos de otros países desde el año 2008 para tributar por ellos.
El departamento entendía que no habían cumplido con sus deberes fiscales a pesar de que en la mayoría de los casos nunca habían sido informados sobre la necesidad de pagar por las pensiones de la emigración. El límite se sitúa en los 11.200 euros anuales, por lo que todos aquellos que entre la pensión de España y la del país donde emigraron superen esa cantidad estarían obligados a ponerse al día.
La Agencia Tributaria precisó ayer que en las liquidaciones efectuadas directamente por este organismo el importe medio de la deuda, por contribuyente, es de 633 euros, e informa de que sólo se apreció infracción y aplicó una sanción en poco más de un tercio de los casos, con un importe medio de 264 euros.
El importe medio de la deuda por contribuyente y año asciende a 998 euros en las autoliquidaciones fuera de plazo presentadas por los contribuyentes tras recibir requerimiento de la Agencia Tributaria para que presenten declaración de IRPF de cada uno de los años, si no habían declarado con anterioridad, o para que completen la presentada en su día incluyendo la pensión recibida del extranjero.
Hasta el momento las sanciones emitidas en estos supuestos (autoliquidaciones fuera de plazo) han sido muy escasas, según destacó la Agencia Tributaria, que puntualiza que sólo en casos aislados, en que se percibieron importes elevados de pensiones en el extranjero y no fueron declarados, se impondrían multas superiores a 10.000 euros por la suma de los cuatro años que pueden ser comprobados.
CASOS SIGNIFICATIVOS
La Agencia Tributaria destacó algunos casos significativos extraídos de las autoliquidaciones presentadas fuera de plazo, y explicó que el contribuyente que más declaró lo hizo por una cuota de 58.000 euros presentando cuatro declaraciones. En los cuatro años había percibido pensiones del extranjero por más de 215.000 euros y no había presentado declaración en ninguno de los cuatro años, ni ingresado cantidad alguna por IRPF. La sanción que se le impondría con reducciones de conformidad y pronto pago sería de 15.000 euros.
El segundo que más declaró lo hizo por una cuota de 40.000 euros y tampoco había presentado declaraciones por estos cuatro años, a pesar de haber cobrado 176.000 euros de pensión del extranjero, por lo que la sanción en este caso sería de 10.000 euros. Solo en estos dos casos de contribuyentes que han presentado sus declaraciones a requerimiento de la Agencia Tributaria la sanción podría superar los 10.000 euros.
En otros cinco casos superaría los 8.000 euros por todos los años, al haber declarado entre 31.000 y 36.000 euros de cuota. A partir de aquí, las cuotas declaradas van bajando y también las sanciones que podrían aplicarse.
Hacienda aclara que el hecho de que estas actuaciones se estén llevando a cabo ahora y no antes está relacionado con la mejora en los procedimientos de intercambio de información con otros países.
La Agencia Tributaria precisó ayer que en las liquidaciones efectuadas directamente por este organismo el importe medio de la deuda, por contribuyente, es de 633 euros, e informa de que sólo se apreció infracción y aplicó una sanción en poco más de un tercio de los casos, con un importe medio de 264 euros.
El importe medio de la deuda por contribuyente y año asciende a 998 euros en las autoliquidaciones fuera de plazo presentadas por los contribuyentes tras recibir requerimiento de la Agencia Tributaria para que presenten declaración de IRPF de cada uno de los años, si no habían declarado con anterioridad, o para que completen la presentada en su día incluyendo la pensión recibida del extranjero.
Hasta el momento las sanciones emitidas en estos supuestos (autoliquidaciones fuera de plazo) han sido muy escasas, según destacó la Agencia Tributaria, que puntualiza que sólo en casos aislados, en que se percibieron importes elevados de pensiones en el extranjero y no fueron declarados, se impondrían multas superiores a 10.000 euros por la suma de los cuatro años que pueden ser comprobados.
CASOS SIGNIFICATIVOS
La Agencia Tributaria destacó algunos casos significativos extraídos de las autoliquidaciones presentadas fuera de plazo, y explicó que el contribuyente que más declaró lo hizo por una cuota de 58.000 euros presentando cuatro declaraciones. En los cuatro años había percibido pensiones del extranjero por más de 215.000 euros y no había presentado declaración en ninguno de los cuatro años, ni ingresado cantidad alguna por IRPF. La sanción que se le impondría con reducciones de conformidad y pronto pago sería de 15.000 euros.
El segundo que más declaró lo hizo por una cuota de 40.000 euros y tampoco había presentado declaraciones por estos cuatro años, a pesar de haber cobrado 176.000 euros de pensión del extranjero, por lo que la sanción en este caso sería de 10.000 euros. Solo en estos dos casos de contribuyentes que han presentado sus declaraciones a requerimiento de la Agencia Tributaria la sanción podría superar los 10.000 euros.
En otros cinco casos superaría los 8.000 euros por todos los años, al haber declarado entre 31.000 y 36.000 euros de cuota. A partir de aquí, las cuotas declaradas van bajando y también las sanciones que podrían aplicarse.
Hacienda aclara que el hecho de que estas actuaciones se estén llevando a cabo ahora y no antes está relacionado con la mejora en los procedimientos de intercambio de información con otros países.
