La Secretaria de Estado de Igualdad y candidata al Congreso por Ourense, Laura Seara, ha abogado hoy por un modelo '100% renovable', sustentando en el sector de las energías renovables como motor económico y de desarrollo, 'más moderno, competitivo y sostenible' y creador de empleo, dijo.
Durante una visita al entorno del complejo termal de Outariz, la cabeza de lista al Congreso dio cuenta del plan sectorial de medio ambiente y energías renovables incluido en el programa socialista, como uno de los sectores 'de mayor futuro para nuestro país'.
En primer lugar, se refirió a las principales cifras de un sector que, dijo, 'reportó de forma directa 7.300 millones de euros, a los que hay que sumar otros impactos económicos indirectos de 3.000 millones de euros, lo que supone el 1% del PIB'.
Destacó, además, la importancia del sector que 'genera actualmente 70.500 puestos de trabajo directos' y que ocupó 'a 111.244 personas en 2010'.
Dentro del programa socialista, Seara proclamó que uno de los objetivos es 'llegar a un modelo 100% renovable en un horizonte a largo plazo de 2050', para lo que anunció una Ley de Energías Renovables, la creación de un fondo estatal de apoyo a estas energías, impulsar el I+D+i en el sector, el diseño de un plan estratégico para la biomasa, y el establecimiento de un canon sobre las tecnologías ya amortizadas, como la hidroeléctrica.
También apuntó que se revisará la regulación del sector eléctrico, al considerar que 'no es suficiente elevar la tarifa para resolver el problema del déficit tarifario', y se elaborará 'un Libro Blanco', para analizar los retos a los que se enfrenta España en materia energética.
Finalmente, en clave gallega, Seara censuró el 'parón' eólico en esta comunidad autónoma, la cuarta con más potencia instalada en energías renovables, 3.759 MW, lo que supone el 14% del total en 2010.
Para la política socialista, Galicia destaca por tener el mayor potencial de eólica marina de España, una tecnología con un enorme potencial de desarrollo y que 'no cuenta con el apoyo de la Xunta; la misma Xunta que suspendió el plan aprobado por el anterior gobierno socialista que preveía crear 3.000 puestos de trabajo', criticó.
