El exsubdirector general del Banco de España Víctor Moro calificó de 'dictatorial' el modo en que las antiguas cajas de ahorros fueron dirigidas antes de la fusión. Así lo manifestó a preguntas de los diputados en la comisión del Parlamento de Galicia que investiga el proceso de fusión de las cajas gallegas y su posterior conversión en una entidad bancaria. Moro rechazó que hubiese habido un exceso de politización en las entidades gallegas, y opinó que sus dirigentes fueron 'dueños y señores' y las 'gobernaron a su antojo', de manera 'dictatorial' y 'sin órganos de control auténticos'.
Reconoció que hubo aciertos y errores, pero dijo que unos y otros son achacables a los dirigentes de las cajas, los que ahora se encuentran en una 'lamentable e incierta situación'. El economista dijo que siempre había abogado por la fusión de las cajas de ahorros para disponer de una entidad financiera gallega con el centro de decisión en Galicia y agregó que ahora tiene tantas razones o más para defender lo mismo y participar en 'el salvamento de los despojos que quedan del naufragio'.
En cuanto a la situación previa de ambas entidades, consideró que las dos 'navegaban en el filo de la navaja' y en nada sustancial se diferenciaban, ninguna podía sobrevivir sola y la fusión era la 'única fórmula posible'.
También compareció ante la comisión parlamentaria el exsecretario de Estado de Economía José Manuel Campa, quien se mostró partidario de 'depurar responsabilidades, no solo políticas, sino también legales'. Campa valoró el proceso de reestructuración del sistema financiero español, que consideró 'histórico', por el grado de cambio registrado, aunque señaló que el dinero invertido fue inferior al de la media de otros saneamientos por crisis bancarias.
SIN DISCRIMINACIONES
Así, dijo que los 59.000 millones de euros destinados a este fin en España suponen el 5,9 % del PIB, por debajo del 7,2 % de la media de los procesos llevados en las últimas décadas en los países desarrollados y muy inferior al 35 % que se destinó en Irlanda. De las preferentes, indicó que se dejaron de emitir en 2009, una vez publicado el FROB, y rechazó que el decreto de 2012, que establecía exigencias de solvencia distintas a las cajas que a los bancos fuese discriminatorio para Galicia, cuando las cajas gallegas suponían el 2 % del sistema.
El exsecretario de Estado consideró que la alternativa planteada de fusión en una caja era 'muy exigente' para Galicia, pues precisaba una gran desinversión.
Además de Moro y Campa, ante los parlamentarios también compareció el presidente de la Confederación de Empresarios de Galicia, Antonio Fontenla, quien afirmó que hubo 'ciertas presiones' en la comercialización por las cajas de ahorros de participaciones preferentes y obligaciones subordinadas, incluso a empresarios que acudían buscando financiación.
Paralelamente, el exgobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, propuso responder por escrito a las cuestiones que le quieran formular los miembros de la comisión, después de reiterar que no puede acudir a comparecer al Parlamento de Galicia antes de septiembre. La respuesta por escrito a través de un cuestionario es una fórmula que usarán el comisario europeo de la Competencia, Joaquín Almunia, y la exconselleira de Facenda Marta Fernández Currás.
En cuanto a la situación previa de ambas entidades, consideró que las dos 'navegaban en el filo de la navaja' y en nada sustancial se diferenciaban, ninguna podía sobrevivir sola y la fusión era la 'única fórmula posible'.
También compareció ante la comisión parlamentaria el exsecretario de Estado de Economía José Manuel Campa, quien se mostró partidario de 'depurar responsabilidades, no solo políticas, sino también legales'. Campa valoró el proceso de reestructuración del sistema financiero español, que consideró 'histórico', por el grado de cambio registrado, aunque señaló que el dinero invertido fue inferior al de la media de otros saneamientos por crisis bancarias.
SIN DISCRIMINACIONES
Así, dijo que los 59.000 millones de euros destinados a este fin en España suponen el 5,9 % del PIB, por debajo del 7,2 % de la media de los procesos llevados en las últimas décadas en los países desarrollados y muy inferior al 35 % que se destinó en Irlanda. De las preferentes, indicó que se dejaron de emitir en 2009, una vez publicado el FROB, y rechazó que el decreto de 2012, que establecía exigencias de solvencia distintas a las cajas que a los bancos fuese discriminatorio para Galicia, cuando las cajas gallegas suponían el 2 % del sistema.
El exsecretario de Estado consideró que la alternativa planteada de fusión en una caja era 'muy exigente' para Galicia, pues precisaba una gran desinversión.
Además de Moro y Campa, ante los parlamentarios también compareció el presidente de la Confederación de Empresarios de Galicia, Antonio Fontenla, quien afirmó que hubo 'ciertas presiones' en la comercialización por las cajas de ahorros de participaciones preferentes y obligaciones subordinadas, incluso a empresarios que acudían buscando financiación.
Paralelamente, el exgobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, propuso responder por escrito a las cuestiones que le quieran formular los miembros de la comisión, después de reiterar que no puede acudir a comparecer al Parlamento de Galicia antes de septiembre. La respuesta por escrito a través de un cuestionario es una fórmula que usarán el comisario europeo de la Competencia, Joaquín Almunia, y la exconselleira de Facenda Marta Fernández Currás.
