Un grupo formado por unas veinte mujeres contrarias a la reforma de la ley del aborto fue desalojado de la tribuna de invitados del Parlamento gallego tras lanzar confeti a los diputados, mostrar pancartas y proferir consignas como 'Nosotras parimos, nosotras decidimos', entre otras. El incidente se produjo al concluir el debate de una proposición no de ley defendida por los tres grupos de la oposición para que el Parlamento se pronuncie contra la reforma de la ley del aborto prevista por el Gobierno y que no prosperó, ya que el PP, grupo mayoritario, votó en contra.
Al concluir el debate este grupo de mujeres se levantó y comenzó a lanzar confeti y a reivindicar su derecho a decidir sobre la maternidad, por lo que la presidenta del Parlamento, Pilar Rojo, ordenó su desalojo. Las mujeres permanecieron aún durante unos instantes en la tribuna de invitados mientras advertían de que seguirán movilizándose para evitar la reforma y gritaban: 'Somos malas, podemos ser peores'.
Durante el debate, las diputadas Carme Adán, Eva Solla y Carmen Acuña, de BNG, AGE y PSdeG, respectivamente, coincidieron en calificar de 'retroceso' el intento del Gobierno de modificar la ley del aborto, mientras que Julia Rodríguez, del PP, defendió que su partido ve 'mejorable' la actual legislación contra el aborto, por lo que no se sumó.
CORCOESTO
Por otro lado, el PPdeG argumentó que la 'alarma social' generada en torno a la posible ubicación de la mina de Corcoesto no está sustentada en una óptica científica y dijo que puede ser beneficiosa si cumple la normativa, frente al criterio unánime de la oposición de que será nociva para el medio ambiente.
Durante el debate, las diputadas Carme Adán, Eva Solla y Carmen Acuña, de BNG, AGE y PSdeG, respectivamente, coincidieron en calificar de 'retroceso' el intento del Gobierno de modificar la ley del aborto, mientras que Julia Rodríguez, del PP, defendió que su partido ve 'mejorable' la actual legislación contra el aborto, por lo que no se sumó.
CORCOESTO
Por otro lado, el PPdeG argumentó que la 'alarma social' generada en torno a la posible ubicación de la mina de Corcoesto no está sustentada en una óptica científica y dijo que puede ser beneficiosa si cumple la normativa, frente al criterio unánime de la oposición de que será nociva para el medio ambiente.
