El presidente del PP, Mariano Rajoy, indicó ayer que su partido se presentará a las elecciones generales con una propuesta de simplificación y reordenación de la administración para evitar duplicidades y 'gastos superfluos' y con una 'prioridad': una competencia, una administración. 'No pueden estar todos haciendo lo mismo', explicó durante su intervención en la clausura del primer encuentro de presidentes de diputaciones, cabildos y consells gobernados por el PP tras la constitución de las corporaciones después de las pasadas elecciones municipales y autonómicas de mayo, en un acto celebrado en el sexto edificio del Museo de Pontevedra.
Ante las puertas del recinto se concentraron medio centenar de personas para reivindicar la supresión de las instituciones provinciales mientras coreaban consignas contra los políticos, la corrupción y la crisis económica.
A su llegada a la reunión, a la que han asistido los vicesecretarios de Organización y Electoral, Ana Mato; y Política Autonómica y Local, Javier Arenas, así como el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, Rajoy recibió de manos del presidente de la Diputación de Pontevedra, Rafael Louzán, una fotografía de su toma de posesión como presidente de esta institución provincial el 11 de junio de 1983.
Durante su alocución, en la que ha evitado de nuevo cualquier referencia al presidente valenciano, Francisco Camps, por la causa de los trajes, el líder del PP ha defendido el 'importante' papel de las diputaciones (27 del PP) para atender a 15 millones de españoles que viven en pequeños municipios y recordó que todas juntas cuentan con un presupuesto de 6.190 millones de euros, inferior al de la mayoría de autonomías, como también lo es su deuda.
'Os animo a seguir trabajando y defendiendo con intensidad, coraje y determinación' las ideas del PP, 'muy necesarias en estos momentos', insistió, con el 'gran objetivo nacional' que es crecer y crear empleo y al que hay que 'subordinar' el resto. En el marco de austeridad, protagonista de sus propuestas, ha planteado además para los gobiernos locales la aprobación de un plan estratégico de racionalización del gasto corriente a cuatro años, que contemple reducciones en representación, parque móvil y energía, revisión de subvenciones, racionalización del uso de teléfonos móviles y gestión integral del patrimonio inmobiliario.
Según Rajoy, las administraciones locales también pueden ayudar con 'austeridad, transparencia, creación de empleo y garantía de las políticas sociales', los cuatro objetivos del PP en los municipios los próximos cuatro años, junto al control de las cuentas públicas.
En la misma línea, el presidente de la Xunta destacó que en el PP nadie asumió la responsabilidad de una diputación o cabildo sin haber ganado las elecciones, y consideró que un ente provincial bien gobernado 'produce ahorro' a los ayuntamientos en la prestación de servicios y buscando sinergias. En este contexto, abogó por una mejor coordinación entre las administraciones y más austeridad, transparencia y garantía de igualdad de oportunidades.n
A su llegada a la reunión, a la que han asistido los vicesecretarios de Organización y Electoral, Ana Mato; y Política Autonómica y Local, Javier Arenas, así como el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, Rajoy recibió de manos del presidente de la Diputación de Pontevedra, Rafael Louzán, una fotografía de su toma de posesión como presidente de esta institución provincial el 11 de junio de 1983.
Durante su alocución, en la que ha evitado de nuevo cualquier referencia al presidente valenciano, Francisco Camps, por la causa de los trajes, el líder del PP ha defendido el 'importante' papel de las diputaciones (27 del PP) para atender a 15 millones de españoles que viven en pequeños municipios y recordó que todas juntas cuentan con un presupuesto de 6.190 millones de euros, inferior al de la mayoría de autonomías, como también lo es su deuda.
'Os animo a seguir trabajando y defendiendo con intensidad, coraje y determinación' las ideas del PP, 'muy necesarias en estos momentos', insistió, con el 'gran objetivo nacional' que es crecer y crear empleo y al que hay que 'subordinar' el resto. En el marco de austeridad, protagonista de sus propuestas, ha planteado además para los gobiernos locales la aprobación de un plan estratégico de racionalización del gasto corriente a cuatro años, que contemple reducciones en representación, parque móvil y energía, revisión de subvenciones, racionalización del uso de teléfonos móviles y gestión integral del patrimonio inmobiliario.
Según Rajoy, las administraciones locales también pueden ayudar con 'austeridad, transparencia, creación de empleo y garantía de las políticas sociales', los cuatro objetivos del PP en los municipios los próximos cuatro años, junto al control de las cuentas públicas.
En la misma línea, el presidente de la Xunta destacó que en el PP nadie asumió la responsabilidad de una diputación o cabildo sin haber ganado las elecciones, y consideró que un ente provincial bien gobernado 'produce ahorro' a los ayuntamientos en la prestación de servicios y buscando sinergias. En este contexto, abogó por una mejor coordinación entre las administraciones y más austeridad, transparencia y garantía de igualdad de oportunidades.n
