Los hechos ocurrieron en la mañana del lunes entre las 08.00 y las 08.30 horas, y fue un viandante que se encontraba en el casco histórico lucense quien dio la voz de alarma.
Medio centenar de personas, entre familiares, amigos y seres queridos, han despedido hoy en el cementerio lucense de San Froilán al anciano fallecido ayer tras ser presuntamente atropellado por un conductor que se dio a la fuga.
La víctima, José Antonio F. N. de 79 años recibió su último adiós con hondo pesar y una gran indignación, por las inexplicables circunstancias en las que al parecer se produjo su muerte, a las cinco y media de esta tarde festiva.
Los hechos ocurrieron en la mañana del lunes entre las 08.00 y las 08.30 horas, y fue un viandante que se encontraba en el casco histórico lucense quien dio la voz de alarma.
Este particular llamó a los servicios de emergencia para comunicarles que en la Plaza del Campo, concretamente en las inmediaciones de la Fuente de San Vicente, había un varón tendido en el suelo y ensangrentado, según han informado fuentes policiales.
A continuación, detallaron las mismas fuentes, los cuerpos de seguridad del Estado establecieron el protocolo de actuación habitual y cuando los servicios médicos y policiales llegaron al lugar de los hechos se encontraron con el cuerpo del septuagenario inmóvil sobre la calzada.
Durante algo más de media hora los sanitarios intentaron reanimar a la víctima, aunque sin éxito, debido a que presentaba lesiones de bastante gravedad.
El cuerpo tenía síntomas y marcas de haber sido atropellado, así como múltiples heridas en varias partes de su cuerpo, especialmente en la cabeza y en las extremidades, algunas de ellas similares a las que se producen por aplastamiento.
Por ello, los investigadores barajaron desde un primer momento que la causa del fallecimiento fuese el atropello, aunque por el momento se desconoce si éste, en caso de haber sido el desencadenante, fue fortuito o intencionado.
Además, en el suelo había rodadas y marcas de neumáticos que han conducido a la misma pista, y otra de las posibilidades que se barajan es que el conductor de algún vehículo de reparto hubiese arrollado a este hombre sin darse cuenta mientras trabajaba en la zona.
El fallecido, según informaron las mismas fuentes, no vivía por la zona del accidente, pero se había levantado temprano esa mañana para asistir al centro de salud ubicado en la Plaza de Ferrol, donde tenía intención de ser atendido.
Fuentes policiales han indicado que no hay testigos del accidente, ya que se registró a una hora muy temprana como para que hubiese tránsito.
Así, una de las líneas de investigación que sigue ahora la Policía Nacional de Lugo, la encargada de averiguar las causas del suceso, es el visionado de las cámaras de seguridad de la zona, para observar con detenimiento si se grabó un hipotético atropello.
