El pleno del Parlamento gallego centró el debate en e Plan Estratégico 2015-2020 que continuará en la sesión de mañana.
El conselleiro de Hacienda, Valeriano Martínez, ha pedido hoy a los grupos parlamentarios "consenso" para la aprobación del Plan Estratégico de Galicia 2015-2020, que instaura un marco estable de actuación para dotar a la Comunidad de "certezas y huir de las improvisaciones".
El pleno del Parlamento ha iniciado hoy el debate de las propuestas de resolución formuladas al Plan Estratégico de Galicia 2015-2020, debate que continuará en la sesión de mañana, jornada en la que además se votarán las proposiciones presentadas por los grupos.
No obstante, las organizaciones políticas de la oposición ya se han manifestado esta mañana contrarias a este plan, que ven poco creíble, en la línea del pasado plan 2010-2014 que no cumplió en absoluto sus previsiones, según han dicho los parlamentarios de la oposición de uno y otro modo.
Ante eso, el titular de Hacienda ha remarcado que se trata de un documento clave para diseñar la "Galicia del futuro" y que contempla como principios irrenunciables el blindaje del gasto social con el refuerzo de la inversión en educación y sanidad sin subir impuestos, el inicio de una senda de reducción del endeudamiento de la Autonomía, el mantenimiento de la solvencia de la Comunidad y la sostenibilidad del gasto público.
Además, Valeriano Martínez ha explicado que para lograr una Galicia estable y competitiva, el Plan establece entre sus objetivos consolidar un crecimiento económico sostenido con un avance anual del PIB superior al 2,5%; y aumentar en 100.000 el número de empleos hasta el año 2020, lo que permitirá reducir la tasa del paro hasta el 10%.
Otras de sus prioridades, según ha apuntado, son duplicar el gasto en I+D, seguir reduciendo la tasa de abandono escolar temprano, o reducir la población en riesgo de pobreza y exclusión social en 100.000 personas. Ha descrito así al Plan Estratégico para la segunda mitad de la década como un documento dinámico, que blinda la estabilidad y establece una estrategia que permite no improvisar y, con ello, fijar objetivos realistas, medir con fiabilidad los resultados conseguidos y diseñar en cada momento las políticas que más les convengan a los gallegos.
Todo ello, "generando confianza" en la sociedad y buscando "soluciones a sus problemas", con el objetivo de devolver a los ciudadanos "todo el esfuerzo que hicieron durante la crisis".
Propósitos que el responsable de Hacienda del Ejecutivo gallego considera realistas, puesto que se llevarán a cabo con "eficacia y eficiencia", convirtiendo así "los nuevos retos en nuevas oportunidades".
Sin embargo, los grupos de la oposición opinan que el contenido del plan contradice los siete años del PP al frente de la Xunta de Galicia.
La socialista Carmen Gallego ha ironizado sobre el contenido del Plan Estratégico puesto que supone "una enmienda a la totalidad a las políticas de Feijóo", e insiste en que, de querer ser llevado a cabo por el Gobierno popular, supondría "cambiar el rumbo" iniciado en 2009, algo que no cree que se dé.
"Las políticas que llevan a cabo contradicen lo que ustedes dicen", ha criticado Gallego dirigiéndose al conselleiro, a quien le ha recordado que como evidencia el análisis inicial del propio Plan "los indicadores son, a día de hoy, peores que cuando el señor Feijóo comenzó a gobernar Galicia".
El grupo socialista presentó 29 propuestas de resolución al texto presentado por el Ejecutivo.
Por su parte, el diputado de AGE Antón Sánchez ha incidido en que un "país no se puede gobernar con argumentarios", que es lo que, a su juicio, recoge el Plan de la Xunta para los próximos cuatro años, proclamando una "estabilidad" que la sociedad no quiere.
"No queremos esa estabilidad, lo que queremos es cambiar. Este Plan debería ser un ocasión para cambiar", ha señalado el representante de AGE, grupo que presentó 23 propuestas de resolución.
Asimismo, Sánchez se ha referido al "desastre" que exhibe el resultado del Plan 2010-2014, que acredita que el Gobierno "se equivocó en todas las previsiones" del anterior documento estratégico de Galicia.
Por ello, ha abundado en que "a ver si esta vez cambiamos de Gobierno para cumplir las previsiones ya que, con ustedes, evidentemente no" se cumplirán, ha espetado.
El portavoz del BNG en la Cámara, Francisco Jorquera, ha advertido de que aunque "el papel lo aguanta todo", para que dicho Plan sea creíble "las políticas públicas tienen que ser congruentes" con lo escrito, condición que -ha asegurado- no se da.
Los nacionalistas, que presentaron 17 propuestas de resolución contra el Plan presentado por el Gobierno gallego, consideran que el mismo es "un brindis al sol, una simple operación de propaganda a las puertas del final de una legislatura".
El parlamentario del Bloque ha considerado así que será difícil dar cumplimiento a los objetivos marcados en el documento "a no ser que" desde el PP "asuman que será otro gobierno de otro color política" quienes los lleven a cabo.
Para la diputada del Grupo Mixto, Consuelo Martínez ha dicho que entre las 35 propuestas de resolución que presentaron, solicitó la redacción de un nuevo Plan estratégico, y ha asegurado que es "mentira" que el presentado por la Xunta mejore el empleo.
Asimismo, ha dicho que el programa del Gobierno gallego niega que en los próximos "cuatro años" se vaya a poder poner a la educación y a la sanidad a los niveles anteriores a la crisis económica.
Por su parte, el portavoz parlamentario del PPdeG, Pedro Puy, ha celebrado el contenido del Plan para el segundo quinquenio de la década, que dibuja buenas expectativas que se basan "en la realidad" y que precisamente es posible porque el Gobierno es "coherente con lo que está haciendo".
Unas metas, ha profundizado, que serán posibles de llevar a cabo gracias a un Gobierno "coordinado", una tipología de Ejecutivo complicado de encontrar ya que, ha recordado, "cada día hay más ejemplos" de lo contrario.
Puy también ha puesto de relevancia el esfuerzo de consenso realizado por el Gobierno, ya que el debatido hoy es el plan "más participativo que hubo nunca en Galicia".
