La policía de Brasil finalmente atrapó a un conductor que debía unos 1,3 millones de euros en multas por exceso de velocidad.
El agente de la policía de Sao Paulo que detuvo a Armando Clemente da Silva quedó impresionado al descubrir que el conductor tenía en su récord unas mil multas sin pagar.
Da Silva había acumulado las infracciones de tráfico a lo largo de un periodo de siete años, la mayoría de ellas por exceso de velocidad y por pasarse semáforos en rojo.
El hombre, de 36 años, afirmó que no había recibido ninguna de las infracciones porque supuestamente había estado muy ocupado como para registrar su vehículo.
Si lo hubiese hecho habría sido imposible para da Silva conducir con su astronómico récord de infracciones.
Da Silva fue detenido por un policía de tránsito el miércoles para una revisión rutinaria de su documentación.
El coche del infractor se cree tiene un valor de 4.000 euros y ya fue confiscado y se le devolvera a da Silva sólo si paga sus multas pendientes en un lapso de 90 días. De lo contrario será subastado.
Da Silva había acumulado las infracciones de tráfico a lo largo de un periodo de siete años, la mayoría de ellas por exceso de velocidad y por pasarse semáforos en rojo.
El hombre, de 36 años, afirmó que no había recibido ninguna de las infracciones porque supuestamente había estado muy ocupado como para registrar su vehículo.
Si lo hubiese hecho habría sido imposible para da Silva conducir con su astronómico récord de infracciones.
Da Silva fue detenido por un policía de tránsito el miércoles para una revisión rutinaria de su documentación.
El coche del infractor se cree tiene un valor de 4.000 euros y ya fue confiscado y se le devolvera a da Silva sólo si paga sus multas pendientes en un lapso de 90 días. De lo contrario será subastado.
