Siempre manteniendo su imagen de diva y mujer fría, nadie podría pensar que a sus casi 50 años Madonna pudiera tener miedo a algo. Sin embargo, en una entrevista a una publicación norteamericana la cantante confiesa que siempre ha tenido miedo a la muerte o que se siente 'vulnerable' cuando se sube a un escenario. Sin embargo, estas fobias no han hecho mella en su carrera y ayer, 35 años después de los inicios de su carrera, fue homenajeada la formar parte del Salón de la Fama del Rock & Roll.
Para la 'reina del pop' la muerte es un pensamiento que está siempre presente en su cabeza, pero de manera inconsciente, ya que, a su juicio, todos sus otros temores culminan en su miedo por perder la vida. 'El final de cualquier cosa implica la muerte: el final de una relación, de una carrera, de la vida física tal como la conocemos', comenta la artista a la revista 'Dazed&confused', en una entrevista recogida por Otr/press. Durante la misma, explica que esta fobia se hace más fuerte cuando tiene que ver con sus hijos y si ellos sufrieran algún accidente o daño.
Pero ésta no es la única confesión de Madonna, quien también explica durante el cuestionario que no tiene miedo a actuar, pero sí que se siente 'vulnerable' cuando se sube a un escenario y a veces, durante sus conciertos tiene que 'dar la espalda al público y respirar profundo' para relajarse. 'Me digo que es algo pasajero', señala la intérprete de 'Hung Up', 'porque si no es como si fuese a morirme allí mismo'.
Estas declaraciones contrastan con la artista que se hizo famosa en los 80 y que decía vivir la vida a tope y que batía récords de conciertos en un año, pues actuaba en giras mundiales y visitaba decenas de países. Entonces, explica, 'fumaba a veces marihuana'. Además, confiesa que probó el 'éxtasis' en una ocasión.
UNA EMINENCIA EN EL MUNDO MUSICAL
Se trata de la primera entrevista que concede, justo cuando está a punto de comenzar a promocionar su último trabajo, 'Hard Candy', y días antes de que la mítica cantante se convirtiera en una eminencia del rock, al ingresar en el Salón de la Fama del Rock & Roll. Durante el acto, la mujer del director Guy Ritchie se mostró muy emocionada y recordó a un profesor que la animó a seguir sus sueños cuando tenía apenas 14 años. 'Y 35 años después, la gente todavía me anima a perseguir mis sueños', dijo durante la ceremonia realizada en el Hotel Waldorf Astoria en Nueva York. '¿Qué más se puede pedir?'.
El encargado de presentar a la homenajeada en un día tan especial, fue Justin Timberlake, que participa como productor en su último disco, y quien, según 'People', puso la guinda de humor al acto señalando durante su discurso: 'en el mundo hay muchas imitadoras de Madonna, quizás yo mismo he salido con algunas', dijo el ex novio de la cantante Britney Spears. 'Pero sólo hay una Madonna'.
Pero ésta no es la única confesión de Madonna, quien también explica durante el cuestionario que no tiene miedo a actuar, pero sí que se siente 'vulnerable' cuando se sube a un escenario y a veces, durante sus conciertos tiene que 'dar la espalda al público y respirar profundo' para relajarse. 'Me digo que es algo pasajero', señala la intérprete de 'Hung Up', 'porque si no es como si fuese a morirme allí mismo'.
Estas declaraciones contrastan con la artista que se hizo famosa en los 80 y que decía vivir la vida a tope y que batía récords de conciertos en un año, pues actuaba en giras mundiales y visitaba decenas de países. Entonces, explica, 'fumaba a veces marihuana'. Además, confiesa que probó el 'éxtasis' en una ocasión.
UNA EMINENCIA EN EL MUNDO MUSICAL
Se trata de la primera entrevista que concede, justo cuando está a punto de comenzar a promocionar su último trabajo, 'Hard Candy', y días antes de que la mítica cantante se convirtiera en una eminencia del rock, al ingresar en el Salón de la Fama del Rock & Roll. Durante el acto, la mujer del director Guy Ritchie se mostró muy emocionada y recordó a un profesor que la animó a seguir sus sueños cuando tenía apenas 14 años. 'Y 35 años después, la gente todavía me anima a perseguir mis sueños', dijo durante la ceremonia realizada en el Hotel Waldorf Astoria en Nueva York. '¿Qué más se puede pedir?'.
El encargado de presentar a la homenajeada en un día tan especial, fue Justin Timberlake, que participa como productor en su último disco, y quien, según 'People', puso la guinda de humor al acto señalando durante su discurso: 'en el mundo hay muchas imitadoras de Madonna, quizás yo mismo he salido con algunas', dijo el ex novio de la cantante Britney Spears. 'Pero sólo hay una Madonna'.