El deporte necesita gente comprometida, a todos los niveles, y de compromiso sabe mucho Carlos Moure. Promotor y organizador de eventos desde hace casi cuatro décadas, lidera además desde la Fundación ADO Moure Pro Deporte una cruzada por la defensa del uso seguro de la bicicleta y la denuncia contra la "violencia vial". Esta actividad le hace merecedor de la "Mención Especial del Jurado" de los premios +Deporte La Región y la próxima semana recibirá su galardón en el transcurso de la gala que se desarrollará en el Auditorio Municipal de Ourense.
"Sí, de alguna manera soy un luchador, y el ciclismo es mi vida desde que cuando tenía 10 años Ramón Carballo Nieto, presidente del Club Ciclista Ourensano, me animó a participar en una prueba. Empecé como ciclista aficionado, continué como competidor en las categorías juvenil, sub-23 y élite, y en el año 1985 monté una tienda, pero siempre vinculado a la organización de carreras. Tengo 63 (años), así que llevo más de medio siglo en esto", subraya un Carlos Moure que se mostraba "muy agradecido a +Deporte / La Región y al jurado por acordarse de mí".
En 1984 nació en la ciudad el "Día de la Bici". Uno de los padres de esta cita lúdico-deportiva-reivindicativa que se desarrolla en Ourense de forma ininterrumpida (hasta este 2020 por causa del covid-19) es Carlos Moure. "El Día de la Bici es una fiesta, en un evento que nació para promocionar el uso y disfrute de la bicicleta. Bajo el lema "La bici te da vida! se pretende reivindicar su utilización. Sí, este año no pudo desarrollarse, pero el drama que está suponiendo por un lado esta pandemia provoca por otro que la gente se haya subido de forma masiva a la bicicleta. Nunca tanta gente ha montado en bici. Hay muchos deportes que están paralizados y el ciclismo está en auge. Lo está por muchos motivos, no solo por el aspecto deportivo, sino también porque no produce tantas lesiones articulares como el atletismo, por ejemplo, e incluso está ganando terreno como medio de desplazamiento en las grandes ciudades. Además, el que descubre la bicicleta ya no la deja", añade.
Un problema invisible
El único problema, "el de la seguridad, porque siempre hay gente que no cumple las normas. Todavía queda mucho por hacer, pero estos últimos años algo ha mejorado la cosa, y lo ha hecho simplemente dando visibilidad a un problema que parecía pasar desapercibido. Hay muchos reincidentes y son un peligro para la sociedad. ¿La solución? Lo primero es concienciar en el respeto, segundo denunciar la violencia vial y tercero contar con el compromiso de las instituciones, los legisladores, las federaciones y la sociedad".
