El segmento de las gravel sigue ganando mercado con el paso de los meses. A pesar de los evidentes problemas de suministro que todavía siguen existiendo en el mercado nacional y que obligan a esperas a la hora de adquirir una bicicleta, los grandes fabricantes siguen mostrando modelos que avanzan en tecnología, rigidez y ligereza.
Giant, después de tres años de éxito con la gama Revolt, ha decidido darle una vuelta al diseño y equipamiento y lanzar una nueva línea de cara a la temporada 2022, en un claro movimiento de cara a ganar cuota de mercado del fabricante taiwanés.
Dos detalles hacen de la nueva Revolt la hacen visiblemente mejor. El primero, que es entre 160 y 200 gramos más ligera (dependiendo de la versión) que su predecesora e incorpora unas geometrías mejoradas.
La segunda, el flip chip, que permite ajustar con apenas un par de movimientos la distancia entre ejes de la bicicleta, para adaptarla a los distintos estilos de conducción y al variable terreno al que se enfrenta este tipo de bicicleta gravel.
Esta nueva versión de la Revolt ha sido optimizada para seguir siendo un referente en cuanto a velocidad. La agilidad con la que el ciclista mueve el conjunto es una evidencia cuando pedalea, gracias al buen trabajo realizado en el diseño del cuadro y en los materiales empleados.
Otro detalle diferenciador es la capacidad para incorporar hasta seis soportes de botella. Las salidas de larga distancia o las aventuras diarias no tendrán el impedimento de la hidratación en una bicicleta pensada para los usuarios expertos que no quieran gastarse una fortuna en una bicicleta.
El precio de la Giant Revolt en su modelo más básico, el “2”, parte de un precio de 1,299 euros, mientras que si lo que se busca es la opción más avanzada, el “Advanced 0” cubrirá todas las necesidades, con un precio de 3,899 euros.
