Incendios

Incendios en Ourense | Desolación e impotencia por el daño provocado por el fuego en Monterrei

30072020-img_8369_resultado
photo_camera Marina Gómez, en su propiedad de San Cristovo. // Sabela Souto
San Cristovo se llevó la peor parte del mayor incendio de Galicia de 2020, con más de un millar de hectáreas ardidas

Desolación, tristeza. La noche del miércoles no fue para dormir en San Millán y en San Cristovo. Imposible conciliar el sueño con el fuego llamando a la puerta y numerosos medios de extinción en un continuo ir y venir. Las llamas calcinaron una superficie de unas mil hectáreas, según la última actualización de Medio Rural, este viernes a las 9,00 horas. El incendio permanece activo, aunque -apuntan desde la Concellería- evoluciona favorablemente. Para su extinción se han movilizado dos técnicos, 31 agentes, 88 brigadas, 29 motobombas, seis palas, 13 helicópteros y 13 aviones, además de efectivos de la UME.

En la mañana del jueves, todos los vecinos coincidían: nunca habían padecido un fuego tan voraz pese a vivir en un entorno castigado especialmente por la lacra de los incendios forestales año tras año. Los escasos dos kilómetros que separan la localidad del concello de Cualedro con la del término de Monterrei se convertían en el camino de la devastación: inviable encontrar un resquicio de lo que hasta pocas horas antes había sido verde.

LA ZONA MÁS AFECTADA

En San Cristovo, el movimiento de las brigadas de extinción -algo más tímido que de madrugada- se entremezclaba con la expectación y el abatimiento de muchos vecinos que vieron peligrar sus casas y sus vidas y que, en pocos segundos, perdían todo aquello por lo que habían trabajado durante meses. 

Una de las más afectadas fue Marina Gómez. Ella y su marido no pudieron hacer nada por salvar la pequeña nave en la que cuidaban gallinas y conejos, y mucho menos por sus cultivos y viñedos. "Non nos queda nada", manifestaba Marina sin poder reprimir las lágrimas. "Que facemos agora para arranxar esto cunha pequena paga que temos para os dous", añadía. Como ella, Avelino González mostraba los restos de su invernadero y se conformaba con que el motor del riego no hubiera sido alcanzado por el fuego. Ambos eran la imagen de la desolación. 

A medianoche del miércoles las hectáreas arrasadas superaban las 700. Ayer pasaban de 1.000. Un nuevo rebrote en San Millán, poco tiempo después de que Medio Rural desactivase el estado 2 de alerta -en torno a las 20,15 de la tarde-, sembraba de nuevo el pánico. 

A los medios desplegados el pasado miércoles en la zona se sumaron efectivos de la Unidad Militar de Emergencias y del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico -Miteco-. Las brigadas tuvieron que redoblar sus esfuerzos para atender nuevos focos procedentes del país vecino luso y que amenazaron Vilardevós y Feces de Abaixo, así como las proximidades de Oímbra.

La buena noticia de la jornada llegó con la extinción del fuego originado en Flariz a finales de la pasada semana.

El fuego avanza de Chaves a la frontera ourensana (JORGE ÁLVAREZ).

Un mes duro

El fuego ya lleva carbonizadas más hectáreas de monte desde que comenzó la campaña de máximo riesgo que en todo el año 2019, cuando se contabilizaron 2.632. Y la oleada de incendios continúa. A última hora de ayer, un incendio se adentraba desde Mairos (Portugal) en los montes de Vilarello da Cota y Arzádegos (Vilardevós). Este incendio, que se propagaba con rapidez a causa de la fuerza del viento, ennegreció durante horas el casco urbano de Verín. 

Medio Rural desplegó en la zona varios medios aéreos y terrestres, que trabajaban de forma conjunta con los bomberos portugueses para evitar que las llamas continuasen avanzando por territorio ourensano. "O lume avanza moi rápido e con virulencia", recordaba el alcalde de Vilardevós, Manuel Cardoso.



Núñez Feijóo ve intencionalidad en el fuego

El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, asegura que el incendio que afecta a Monterrei y Cualedro se declaró en dos focos a un mismo tiempo. "Es una intencionalidad evidente". A su entender, las llamas se declararon en una zona de concentración parcelaria, en las que el terreno está abandonado y con maleza. El presidente del Ejecutivo gallego recordó que las fuerzas de seguridad están haciendo un seguimiento a un total de 90 presuntos incendiarios, de los que hay sospechas de que podrían plantar fuego.  

Por su parte, el secretario xeral del PSdeG , Gonzalo Caballero, pidió a la Xunta poner en marcha todas las medidas en la lucha contra los incendios, así como activar más políticas de prevención.

Te puede interesar