Este viernes 11 de agosto tendrá lugar el acto de la imposición de medallas de la Cofradía de los Vinos de Monterrei, en el que serán nombrados tres nuevos integrantes de la misma. Este acto, que vuelve a realizarse conjuntamente con la celebración de la Feria del Vino de Monterrei, se llevará a cabo en la Iglesia Parroquial de Verín, a partir de las 18,30 horas (entrada libre hasta completar aforo).
En esta ocasión, se sumará la Cofradía de los Vinos de Monterrei, el actual presidente de la Federación Española de Enología (FEAE). Luis Buitrón Barrios estudió enología en la Escuela de Viticultura y Enología de Requena (Valencia). Inicia su actividad profesional en Galicia, trabajando en bodegas de Ribeiro, Valdeorras, Rías Baixas y, por supuesto, Monterrei. Sigue con su profesión en la zona de Ribera del Duero y León para finalmente retornar a Galicia. Entre los años 1994 y 1999, fue director técnico del C.R.D.O. Ribeira Sacra. A partir de ahí se dedica al asesoramiento de bodegas en Galicia, Asturias y Castilla y León. De 2015 a 2021 es presidente de la Asociación Gallega de Enólogos. Después de ser vicepresidente de la FEAE, entre 2017 y 2021, alcanza la presidencia de esa entidad en el 2021, además de ser miembro de la directiva de UIOE (Unión Internacional Asociaciones de Enólogos).
El que será nuevo miembro de la Cofradía de los Vinos de Monterrei afirma que en esta denominación de origen -una de las cunas del godello- se están produciendo “de los mejores monovarietales de España” de esta variedad. “El contraste térmico brutal de Monterrei”, afirma Buitrón, “esculpe una maduración única en el godello”. Además de Luis Buitrón también serán nombrados nuevos cofrades Josefa Álvarez Araújo y Emilio Santos Rodríguez.
Reconocimiento
Dos integrantes, con fuerte vinculación con la comarca de Monterrei, que ven reconocido con este nombramiento su dedicación, pasión y trabajo en el sector vitivinícola. Josefa Álvarez, “Morena”, constituye el mejor ejemplo del orgullo y amor por el viñedo. Nacida en el año 1965 en As Chas (Oímbra), desde pequeña siempre ayudó a sus progenitores en el cuidado de las cepas y de las uvas. Después de estudiar un ciclo de administrativo, y trabajar durante varios años en Andorra, decidió volver a su localidad para cuidar aquello que más le gustaba. “Estou orgullosa de traballar no campo, son moi feliz ao estar nos bacelos, e alí ocúpome de todas as labores, desde podar, enxertar, vendimar…”, destaca Álvarez Araújo, “aínda que houbo momentos difíciles, como os acontecidos cos incendios, sempre traballei para recuperar os viñedos, xa son a miña vida”.
El caso de Emilio Santos, “Lucho” de Gondulfes, representa la figura tanto de viticultor como de tabernero, cerrando así el ciclo desde la cepa a la copa. Nació en el año 1939 en Gondulfes (Castrelo do Val), en el seno de una familia dedicada al ganado y comercio con una tienda en su localidad natal. Tras estudiar en el colegio La Salle en Verín, se fue a Ourense. Su impulso natural a no olvidar el campo, llevó consigo que retornara y se hiciera cargo tanto de los viñedos como del negocio de su padre. Poco a poco, tanto “Lucho” como su mujer convirtieron su taberna en un lugar de encuentro, donde los clientes se fueron convirtiendo en amigos. Su simpatía, atención y bonhomía consolidaron como imprescindible un nutrido peregrinaje de clientes hasta esta localidad en Castrelo do Val, en plena D.O. Monterrei.
