Portugal viene de implementar la medida de IVA cero en un paquete que comprende 46 alimentos básicos, en el que se reduce hasta octubre el IVA para paliar la subida de precios. En los supermercados de Chaves ya se pueden ver las etiquetas “IVA Zero” en estos productos, como el pan -sólo 3 céntimos más barato- o en el aceite -2,10 euros más barato-.
Entre numerosos alimentos, lo más destacado y que más ha llamado la atención de los vecinos del otro lado de la frontera -los de la comarca de Monterrei- es la reducción del IVA en carne y pescado, algo que en España lleva reclamando el sector hace tiempo, sin lograr una rebaja. Así, los vecinos de Verín ya tienen un aliciente más para desplazarse a Chaves: ahorrar un 32% en un kilogramo de bacalao o un 26% en la carne de ternera. “Se vas a facer unha compra grande pode merecer a pena, pero ir ata Chaves de pé feito para mercar uns filetes… o final gastas o mesmo contando o combustible”, comentan vecinas de Verín.
Diferencia en compras grandes
Para “gustos, colores”. Son muchos los que prefieren no coger el coche, pero también otros que aprovechan las ventajas de vivir en la frontera para hacerse con cualquier mínimo descuento y poder ahorrar en la lista de la compra. Es el caso de María Guadalupe Davila Quintana, quien regenta el bar de Bousés (Oímbra) y que siempre compra en Chaves: “Me queda un poco más cerca y abren más pronto que en Verín, además las cuentas a mí me dan que ahorro”, anota la joven, quien lleva el maletero de su coche cargado tras hacer compras en varios establecimientos. “Hoy noté el IVA cero, sobre todo en el Lidl, que hice una compra de unos 160 euros, y quien diga que no se nota es porque compra poca cosa, pero así se nota, es un alivio”, añade.
Así, muchos vecinos de la comarca se benefician de los descuentos, especialmente en pescado y carne, mientras que los portugueses son críticos con el “IVA Zero”, considerándolo una “medida política”. “Non vale a pena, son uns céntimos que aforras pero os prezos seguen a ser elevados. Está todo moi caro”, lamentan María Pires y Fernando Pires, una pareja de Chaves que salía de un supermercado portugués con una compra de 42 euros “e moi poucas cousas, en dous días temos que estar aquí de novo”.
Eso sí, los hay que no cambian sus costumbres y, a pesar de las reducciones en Portugal y la subida de precios en supermercados verineses, continúan peregrinando a la villa del Támega para hacer sus compras semanales en el Mercadona o en los comercios de Feces de Abaixo, los lugares por excelencia frecuentados por los vecinos raiotos. “É unha costume, e os produtos son de calidade, merece a pena gastar algo máis”, comenta Francisco Lluis.
"Aproveitamos para ver os prezos, hai pequenas diferenzas"
Como muchos vecinos de Verín, Consuelo Adriano y José Pérez se acercaron a Chaves para visitar su feria semanal y llevar el coche al taller. Aprovecharon el desplazamiento al país vecino para acudir al supermercado en busca de un producto concreto, que finalmente no encontraron.
También compararon los precios para ver dónde es más rentable: “Nós acostumamos a mercar en Verín, aquí só se nos pilla de paso”, cuenta la pareja, quienes notaron algunas diferencias: “Hai pequenas diferenzas na carne e no peixe, por exemplo, pero non esaxeradas. Non creo que cambiemos os hábitos de compra”, concluyen.
