La presidenta argentina, Cristina Fernández, regresó ayer a Buenos Aires donde retomó sus actividades al frente del Ejecutivo tras el fallecimiento el miércoles pasado de su esposo y antecesor, el ex mandatario Néstor Kirchner. Fernández pasó el fin de semana en la provincia sureña de Santa Cruz, donde el viernes dio el ultimo adiós a los restos de su esposo, mientras una multitud se congregó a las puertas del cementerio de Río Gallegos, ciudad natal de Kirchner.
La mandataria regresó a Buenos Aires en el avión Tango 03, junto a sus hijos Florencia y Máximo y la ministra de Desarrollo Social, Alicia Kirchner. Tras ser recibida por el secretario General de la Presidencia, Oscar Parrilli, la gobernante abordó un helicóptero para trasladarse a la residencia de Olivos, a las afueras de Buenos Aires.
Fuentes oficiales indicaron que aunque Fernández retomará su trabajo, el acto que estaba previsto con gobernadores de provincias vitivinícolas ha sido pospuesto. Asimismo, se confirmó la semana próxima emprenderá viaje a Corea, para la cumbre del G-20.
Fuentes oficiales indicaron que aunque Fernández retomará su trabajo, el acto que estaba previsto con gobernadores de provincias vitivinícolas ha sido pospuesto. Asimismo, se confirmó la semana próxima emprenderá viaje a Corea, para la cumbre del G-20.
