En un cambio sustancial de posición, el Consejo de Guardianes de Irán informó que está listo para realizar el recuento de los votos disputados en la elección presidencial del viernes pasado. Sin embargo, la oposición sigue en las calles y volvieron a protagonizar manifestaciones. Hasta el momento, se han registrado ocho muertos en los enfrentamientos entre opositores y las milicias progubernamentales.
Tras bambalinas hay evidencia de una gran batalla política sobre cómo responder a la crisis. Sin embargo, candidato reformista Mir Hossein Mousavi -quien ha dicho que los resultados que dieron la victoria al actual presidente, Mahmud Ahmadineyad son fraudulentosaseguró que el recuento no tendría ningún sentido, pues sospecha que millones de votos han desaparecido.
El Consejo Supremo de los Guardianes de la Revolución órgano legislativo supremo del paísexplicó que el recuento se realizará en áreas disputadas por los candidatos perdedores. Previamente, el consejo había establecido que los resultados de los comicios eran sólo provisionales.
Los seguidores de Mousavi se han manifestado en las calles de Teherán desde el sábado. La radio nacional iraní informó este martes de que al menos ocho personas habrían muerto en Teherán, la capital de Irán, durante las manifestaciones de protesta del lunes.
Pero también salieron a la calle los seguidores de Ahmadineyad y existen temores de que esta marcha choque con una que tiene proyectada la oposición. El propio Mousavi pidió a sus seguidores que no participen en estas protestas para que no pongan sus vidas en peligro.
En la movilización de este lunes participaron cientos de miles de personas y fue una de las más grandes desde la revolución islámica, hace 30 años.
Las muertes que reportó la radio estatal ocurrieron, según señaló el medio, al final de una marcha ilegal. Un grupo de manifestantes quiso atacar un puesto militar y realizó numerosos actos vandálicos contra el mobiliario público en la plaza de Azadi. Desgraciadamente siete personas murieron y varias otras resultaron heridas, informó la radio. La emisora estatal no especificó si los muertos eran seguidores de Mousavi.
El presidente iraní, por su parte, ha negado las acusaciones de fraude y ha acusado a la prensa internacional de no querer aceptar su victoria simplemente porque no les cae bien.
INQUIETUD INTERNACIONAL
La forma en que las autoridades iraníes han manejado las protestas ha generado críticas en la comunidad internacional. Los cancilleres de la Unión Europea hicieron un llamamiento para que se lleve a cabo una investigación del proceso electoral.
Mientras tanto, el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, dijo el lunes estar profundamente preocupado por la situación que se vive en Irán. Obama afirmó que el proceso democrático, la libertad de expresión y la capacidad del pueblo de disentir pacíficamente son valores universales que han de ser respetados, en referencia a la prohibición por parte del gobierno de Irán de realizar manifestaciones.
A todos aquellos que ponen tanta esperanza y energía en el proceso político, les diría que el mundo los está observando, dijo Obama.
Y mientras Irán continúa viviendo un momento de aguda tensión política, Ahmadineyad viajó a Rusia este martes para participar en un encuentro regional. El viaje a la ciudad de Yekaterinburg estaba previsto para el lunes, pero el presidente iraní decidió postergarlo a raíz de las protestas.
Antes de partir hacia Rusia el presidente hizo declaraciones a los medios pero no mencionó el tema de las manifestaciones.
SUSPENDIDOS LOS PERMISOS DE LA PRENSA EXTRANJERA
Por otra parte, el ministerio de Guía y Orientación Islámica de Irán advirtió a los medios extranjeros de que los permisos concedidos para cubrir actos en las calles de Teherán han sido anulados y que no pueden acudir a acto alguno que no cuente con autorización.
En un fax llegado a la oficina de la agencien Teherán, el ministerio hace constar que todas las representaciones de los medios extranjeros deben evitar cualquier actividad periodística sin coordinación y sin permiso de la oficina general de los medios de comunicación extranjeros y de Guía Islámica.
No deben participar en ningún acto que no haya sido anunciado por parte de esta oficina y deben evitar cubrir concentraciones que sean ilegales, agrega.
Los funcionarios del ministerio explicaron que las acreditaciones que habían sido extendidas a los periodistas para moverse por la ciudad han sido canceladas y que, de momento, los informadores deben permanecer en las oficinas.
Además, aseguraron que desde este momento no se hacen responsables si no se respeta la circular.
El Consejo Supremo de los Guardianes de la Revolución órgano legislativo supremo del paísexplicó que el recuento se realizará en áreas disputadas por los candidatos perdedores. Previamente, el consejo había establecido que los resultados de los comicios eran sólo provisionales.
Los seguidores de Mousavi se han manifestado en las calles de Teherán desde el sábado. La radio nacional iraní informó este martes de que al menos ocho personas habrían muerto en Teherán, la capital de Irán, durante las manifestaciones de protesta del lunes.
Pero también salieron a la calle los seguidores de Ahmadineyad y existen temores de que esta marcha choque con una que tiene proyectada la oposición. El propio Mousavi pidió a sus seguidores que no participen en estas protestas para que no pongan sus vidas en peligro.
En la movilización de este lunes participaron cientos de miles de personas y fue una de las más grandes desde la revolución islámica, hace 30 años.
Las muertes que reportó la radio estatal ocurrieron, según señaló el medio, al final de una marcha ilegal. Un grupo de manifestantes quiso atacar un puesto militar y realizó numerosos actos vandálicos contra el mobiliario público en la plaza de Azadi. Desgraciadamente siete personas murieron y varias otras resultaron heridas, informó la radio. La emisora estatal no especificó si los muertos eran seguidores de Mousavi.
El presidente iraní, por su parte, ha negado las acusaciones de fraude y ha acusado a la prensa internacional de no querer aceptar su victoria simplemente porque no les cae bien.
INQUIETUD INTERNACIONAL
La forma en que las autoridades iraníes han manejado las protestas ha generado críticas en la comunidad internacional. Los cancilleres de la Unión Europea hicieron un llamamiento para que se lleve a cabo una investigación del proceso electoral.
Mientras tanto, el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, dijo el lunes estar profundamente preocupado por la situación que se vive en Irán. Obama afirmó que el proceso democrático, la libertad de expresión y la capacidad del pueblo de disentir pacíficamente son valores universales que han de ser respetados, en referencia a la prohibición por parte del gobierno de Irán de realizar manifestaciones.
A todos aquellos que ponen tanta esperanza y energía en el proceso político, les diría que el mundo los está observando, dijo Obama.
Y mientras Irán continúa viviendo un momento de aguda tensión política, Ahmadineyad viajó a Rusia este martes para participar en un encuentro regional. El viaje a la ciudad de Yekaterinburg estaba previsto para el lunes, pero el presidente iraní decidió postergarlo a raíz de las protestas.
Antes de partir hacia Rusia el presidente hizo declaraciones a los medios pero no mencionó el tema de las manifestaciones.
SUSPENDIDOS LOS PERMISOS DE LA PRENSA EXTRANJERA
Por otra parte, el ministerio de Guía y Orientación Islámica de Irán advirtió a los medios extranjeros de que los permisos concedidos para cubrir actos en las calles de Teherán han sido anulados y que no pueden acudir a acto alguno que no cuente con autorización.
En un fax llegado a la oficina de la agencien Teherán, el ministerio hace constar que todas las representaciones de los medios extranjeros deben evitar cualquier actividad periodística sin coordinación y sin permiso de la oficina general de los medios de comunicación extranjeros y de Guía Islámica.
No deben participar en ningún acto que no haya sido anunciado por parte de esta oficina y deben evitar cubrir concentraciones que sean ilegales, agrega.
Los funcionarios del ministerio explicaron que las acreditaciones que habían sido extendidas a los periodistas para moverse por la ciudad han sido canceladas y que, de momento, los informadores deben permanecer en las oficinas.
Además, aseguraron que desde este momento no se hacen responsables si no se respeta la circular.
