El Jefe de los cascos azules admite que afrontan una dura misión en Siria

El jefe de los cascos azules, Hervé Ladsous, admitió hoy que los observadores de Naciones Unidas afrontan una dura misión en Siria, pero expresó su esperanza sobre su capacidad para desarrollarla.
'Los diplomáticos deberían ser siempre optimistas. Estoy de acuerdo con que (la situación) es peor ahora que antes, pero confío en que los círculos viciosos se acabarán y el diálogo comenzará', dijo Ladsous en declaraciones a la prensa, tras llegar ayer a Damasco para evaluar el conflicto sobre el terreno.

El subsecretario general para Operaciones de Paz de la ONU destacó que los observadores tienen como misión encontrar una solución política, por lo que continuarán 'haciendo todo lo posible' para alcanzar ese objetivo.

Asimismo, resaltó que el número de observadores en Siria se ha reducido a la mitad, de 300 a 150, por cuestiones de seguridad y la continuación de la violencia.

La visita de Ladsous, la segunda en dos meses, se produce después de que el pasado día 20 el Consejo de Seguridad de la ONU acordara ampliar por un periodo final de 30 días la Misión de Observación del organismo en Siria (UNSMIS).

El jefe de los cascos azules agregó que esta mañana mantuvo 'fructíferos' encuentros con oficiales sirios para evaluar la situación y presentarles al nuevo responsable de la misión, el senegalés Babacar Gaye.

Gaye, el principal asesor militar de la ONU que sustituirá al general Robert Mood al frente de la misión, llegó a Damasco anoche y señaló hoy a los periodistas que pondrá todos sus esfuerzos en 'ayudar a aliviar el sufrimiento de los sirios'.

Tanto Ladsous como Gaye visitan Siria tras una semana en la que los enfrentamientos entre las fuerzas del régimen y los rebeldes se han intensificado en Damasco y la segunda ciudad del país, Alepo.

Te puede interesar