"El pueblo debe decidir si quiere guerra o quiere paz", dice el presidente cuando la paz está cada día más lejos del horizonte con más de treinta muertos desde que comenzaran las protestas hace un mes
Desde que el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, anunciara la convocatoria de la Asamblea Constituyente para redactar una nueva Carta Magna `a su medida`, las protestas y manifestaciones han regresado masivamente a las calles del país y se han encontrado de frente con la represión más brutal hasta la fecha.
Las víctimas se cuentan por centenares después de que la Policía Nacional Bolivariana y la Guardia Nacional hayan cargado contra las miles de personas que marchaban por las calles de Caracas y por otras ciudades del país, como la localidad de Chacao en el Estado de Miranda.
El caos que ha vivido Venezuela el miércoles 3 de mayo será recordado como una de las jornadas más violentas desde que comenzaran las protestas contra Maduro hace poco más de un mes. Imágenes de tanquetas arremetiendo contra los manifestantes han dado la vuelta al mundo cuando el baile de cifras de muertos y heridos ha sido constante debido, entre otras cosas, a que los conatos violentos no han desaparecido de las calles en toda la noche.
Un menor ha sido asesinado al recibir un impacto en el cuello y se baraja la cifra de 400 heridos, según algunos medios. Otros llegan a hablar incluso de cuatro fallecidos tras esta jornada sangrienta, elevando la cifra de fallecidos a 35. Lo cierto es que se supera ya la treintena de víctimas mortales. No obstante, la noche del miércoles, la más violenta desde hace un mes, Maduro aparecía en la televisión venezolana bailando salsa.
Por su parte, el secretario de la Organización de Estados Americanos (OEA) no ha tardado en condenar el "brutal salvajismo" de la Policía "que no mide sus consecuencias" al tiempo que ha pedido al Gobierno "que frene la ola de represión y violencia ya".
Sólo en Chacao, 164 personas resultaban heridas. 137 presentaban traumatismos, ocho eran alcanzadas por "perdigones", 17 han sufrido síntomas de asfixia y dos personas eran atendidas por quemaduras.
Mientras esto sucedía en Venezuela, su presidente celebraba que había entregado ante el Consejo Electoral su propuesta para elaborar una nueva Constitución que se acomode a sus deseos. Decisión fuertemente rechazada desde la oposición e incluso desde un sector de chavistas críticos que han descalificado la anunciada Asamblea Constituyente.
Ajeno a las protestas, a las críticas, e incluso a la violencia contra sus ciudadanos, el presidente se presentaba rodeado de sus incondicionales bailando al ritmo de salsa cuando miles de venezolanos opositores eran machacados por la Policía.
Maduro ha acudido el miércoles a la sede del Consejo Nacional Electoral para entregar su propuesta para convocar una Asamblea Nacional Constituyente.
El presidente quiere una nueva Carta Magna con la que presumiblemente busque alargar su mandato aunque disfrace su decisión diciendo que pretende derrotar el supuesto "golpe de Estado" con el que la oposición y sus aliados regionales pretenderían hacer caer a su Gobierno.
"Les entrego el poder a ustedes para que el pueblo decida cuál es el destino de la patria" decía Maduro ante cientos de fieles congregados en una plaza frente a la sede del Consejo. "El pueblo debe decidir si quiere guerra o quiere paz", ha añadido el mandatario.
LA FISCAL GENERAL DICE QUE SE TOMAN DECISIONES "NO ACORDES A LA LEY"
Sin embargo, incluso la fiscal General Luisa Ortega, ha llegado a decir al diario `The Wall Street Journal` que no se puede exigir a los ciudadanos un comportamiento pacífico "si el Estado toma decisiones que no van acordes a la ley".
En el marco de la entrevista, Ortega Díaz ha considerado que dada la situación que vive el país es necesario dialogar y negociar, y llegar a "decisiones" que se tomen "por el bien del país".
Con respecto a la Carta Magna, que ha definido como "la Constitución de (el fallecido presidente, Hugo) Chávez", la fiscal general ha asegurado que ésta es "inderrotable".
Además, ante la insistencia de Amnistía Internacional, de la oposición y de la familia, el Gobierno de Venezuela ha publicado el miércoles un vídeo del dirigente de Voluntad Popular Leopoldo López, en la prisión militar de Ramo Verde desde febrero de 2014, como "prueba de vida" ante los rumores de que había sido trasladado a un hospital militar.
La esposa de López, Lilian Tintori, anunció a través de su cuenta oficial de la red social Twitter que estaba "de camino al hospital militar" donde pretendía "pedir ver a Leopoldo". Una vez en el centro hospitalario, volvió a escribir para indicar que las autoridades le habían dicho que su esposo no estaba ahí. "Queremos saber la verdad ¡Basta de tanto dolor! ¡Queremos ver a Leopoldo!", lamentó después.
El primer vicepresidente del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), Diosdado Cabello, durante su programa retransmitido por la cadena estatal Venezolana de Televisión, dio paso, pidiendo "silencio" porque "no tiene buen sonido", a las imágenes de López.
"Tienen que escuchar porque yo tengo una grabación de Leopoldo López de ahorita", ha indicado, instantes antes de dar paso a la grabación. En la misma, el opositor explica que se trata de un "mensaje de fe de vida" para su familia.
"Hoy es 3 de mayo, son las 21.00 de la noche. No entiendo la razón por la que se quiere dar una fe de vida en este momento. Estoy bien", se le puede escuchar.
Entretanto, Tintori ha señalado, una vez más a través de sus redes sociales, que a las 00.38 horas, se encontraba en la cárcel militar de Ramo Verde "exigiendo" que la dejen ver a su marido.
AI DENUNCIA LAS CONDICIONES DE RECLUSIÓN DE LEOPOLDO LÓPEZ
Por su parte, la directora de Amnistía Internacional (AI) para América, Erika Guevara-Rosas, ha trasladado el miércoles al ministro de Defensa de Venezuela, Vladimir Padrino, la preocupación del grupo por la situación de Leopoldo López.
En una `carta abierta` al titular de la cartera de Defensa, Guevara-Rosas ha recordado que AI ha recibido "información" sobre las condiciones de reclusión de López que podrían "constituir graves violaciones a sus Derechos Humanos y a su integridad personal".
"Según la información recibida, el señor López se encuentra en aislamiento desde hace más de 15 días, sin haber notificado a sus abogados sobre el proceso ni la motivación de esta decisión", ha señalado en la misiva, antes de agregar que además que las autoridades han utilizado este aislamiento "para justificar impedir el contacto" con sus familiares y con su defensa.
Esta detención incomunicada y el aislamiento prolongado, ha denunciado, constituyen en sí mismos "malos tratos" en virtud del Derecho Internacional y la Legislación venezolana, por lo que ha instado al Gobierno de Nicolás Maduro a que cumpla con la ley.
