La imagen que transmite el cartelito de la foto, totalmente del siglo pasado, por no decir del anterior, desmerece mucho cualquier cosa que anuncie y quiera promocionarse. Parece mentira que una entidad como Abanca "firme" el esperpento. Y además, quien los colocó pretende que lo lean conductores que, como en este caso, en el acceso a Marcelo Macías desde la N-525, más vale que estén atentos al tráfico que a leer el dichoso cartel.