Dicen que después de la tormenta viene la calma, pero al grupo de gobierno del Concello de Barbadás parece darles igual la suciedad que se acumula en las aceras y lo dejan todo a la mano de Dios. Un buen ejemplo lo tenemos en la carretera que une la capitalidad municipal con A Valenzá, con la acera llena de tierra, uno de los efectos que provocó la fuerte tormenta de la que ya pasaron varias semanas, así como de maleza, sin que nadie la limpie.
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Edmundo Rey
14/jul./21 - 04:21
Actualizado:
14/jul./21 - 00:21
14/jul./21 - 00:21
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