La madre de la niña agredida en Carballiño pide reformar la Ley del Menor
“A mi hija no la mataron, pero sí le quitaron su vida”, lamentó este sábado la madre de Nuria, la menor de 14 años a la que otro niño -de 13- golpeó brutalmente en la cabeza el pasado septiembre. Ahora, pese a estar fuera de peligro, tiene un daño cerebral permanente que su familia cree que le impedirá llevar una vida normal.
Los hechos ocurrieron el 9 de septiembre. Los menores estaban en casa del agresor, donde él le asestó un golpe con una pata de cabra a ella porque “quería saber qué se sentía al matar”. A continuación, ella se cayó del balcón, una segunda planta a unos 12 metros de altura. Desde entonces, la menor permaneció en cuidados intensivos durante más de un mes. Su vida pasó días en estado crítico, pero finalmente consiguió estabilizarse.
Este sábado familiares, amigos y vecinos se volvieron a reunir en O Carballiño para pedir que cambie la Ley del Menor y que contemple excepciones a la hora de condenar en casos como el de Nuria, en los que media premeditación o se es plenamente consciente del acto que se está llevando a cabo.
El entorno de la niña está dispuesto a continuar marcando manifestaciones en el calendario hasta que haya una respuesta. “Vamos a pedir que se cambie la Ley del Menor para que lo que le ha sucedido a Nuria no continúe quedando impune”, afirmaba la madre.
“A mi me encantaría que Feijóo se pusiese en contacto con nosotros, porque lo hemos intentado y no nos responde. Al menos para enfocar nuestro camino, para darnos unas pautas”, señala su progenitora. Lamenta la situación de desamparo en la que se encuentran y la ausencia total de ayuda institucional. “No hay plataformas, ONG, ni nada para estos casos. ¿Quién apoya a una niña que por suerte no la mataron, pero a la que sí le quitaron su vida?”, reflexiona.
“Nos gustaría montar una plataforma para seguir reivindicándonos, pero también que hubiese más involucración por parte del gobierno autonómico y de otras instituciones, estamos solos”, lamenta la madre de Nuria. Donde esta familia no estuvo sola fue en la manifestación que se celebró ayer en O Carballiño. Allí se congregó un grupo de personas para pedir que los menores dejen de ser inimputables.
No es la primera manifestación que se congrega ni el único medio que la familia está empleando para reivindicarse. La hermana de la joven, Cristina, lanzó una petición en la plataforma change.org que ya lleva recogidas más de 10.000 firmas. Ayer, instalaron una mesa en la iglesia de Veracruz para que también pudiesen firmar por su causa los que no tienen acceso a internet.
